Paul Seixas es la última gran perla que ha salido de Francia. Algo más de una semana después de haber quedado tercero en el Campeonato de Europa júnior, por detrás de Felix Orn-Kristoff y del talentoso español Héctor Álvarez, y un día antes de cumplir 18 años, se ha convertido en campeón del mundo contrarreloj de su categoría en el
Mundial de Zúrich, superando a los belgas Jasper Schoofs y Matisse Van Kerckhove por apenas 6 y 7 segundos respectivamente.
Como suele ocurrir cuando surge un nuevo supertalento francés, rápidamente se habla del
Tour de Francia y de la larga espera de un ganador local del maillot amarillo. "Por supuesto. Muchos empezarán a hablarme de ello, pero aún quedan grandes años por delante", responde Seixas con una madurez superior a la de sus años cuando le pregunta sobre el tema
Eurosport.
Con Seixas celebrando su 18º cumpleaños este martes, la victoria en el Tour de Francia parece algo lejana, pero a medida que se acerque al World Tour en 2024 para el equipo
Decathlon AG2R La Mondiale, no pasará mucho tiempo antes de que veamos cómo se desenvuelve el niño prodigio francés entre la élite.
"Por supuesto, el resultado final para mí, mi sueño, sería ir al Tour y hacer algo. Ganar el Tour de Francia es un sueño, como para el 90 o el 95% de los corredores, pero aún queda mucho trabajo por hacer. No hay que decirse a uno mismo que voy a ganar el Tour de Francia mañana", prosigue. "Va a ser largo, va a ser duro, pero lo más importante es divertirse y estar bien apoyado. Creo que, en ese sentido, he hecho la mejor elección".
En cuanto al equipo Decathlon AG2R La Mondiale, Seixas no se arrepiente de haber elegido el equipo francés a pesar de tener ofertas de otros lugares. "Sí, es verdad. Hubo contactos, no lo voy a negar", concluye. "También es algo que me enorgullece porque demuestra que mi temporada fue un éxito. Tomé esa decisión, no me arrepiento. Estoy feliz de estar aquí".