"Dormí mal, no tenía apetito": Las claves del lamentable Tour de Francia 2025 de Remco Evenepoel

Remco Evenepoel vivió un 2025 accidentado: debutó en abril por las graves lesiones del choque de diciembre, y otra caída en el campeonato nacional descarriló su preparación para el Tour de France. El campeón olímpico ha detallado qué falló en la Grande Boucle.

El belga deja Soudal - Quick-Step para unirse a Red Bull - BORA - hansgrohe este invierno y el movimiento está motivado por el giro del equipo belga de nuevo hacia las clásicas, mientras Evenepoel mira a las Grandes Vueltas y a un respaldo más sólido. En la escuadra alemana lo tendrá, por presupuesto y por un núcleo ya amplio de corredores de primer nivel.

Pero en logística, también percibe la diferencia. “Pongo un ejemplo: reservaron habitaciones en el Teide para toda la primavera hace tres o cuatro meses. En Soudal Quick-Step no era así. Allí era más freestyle: vale, ahora vamos allí a hacer una concentración”. La mejor organización encaja con Evenepoel, que asegura que entrará en 2026 con el calendario prácticamente definido. También buscaba un cambio tras muchos años con la misma estructura y entrenador, con la esperanza de seguir subiendo el techo.

“En las primeras conversaciones quedó claro que llevarme a mi preparador no era una opción. Tuve que pensarlo. Empecé a trabajar con Koen [Pelgrim] en el verano de 2018. Estuvimos juntos mucho tiempo y logramos resultados fantásticos. Pero quizá ahora, si quiero seguir desarrollándome, toca buscar a alguien que me ayude a mejorar en ciertos aspectos.”

Con el recorrido del Giro de Italia desvelándose mañana, sabremos más sobre las ambiciones de Evenepoel. Si corre el Giro, su primavera será más reducida. Si no, deberíamos verlo en Milano-San Remo y en el Tour de Flandes antes de apuntar a sus objetivos habituales.

Es una opción interesante, que debería resolverse en los próximos días. Pero el Tour de Francia no se discute mientras la salud acompañe: “Hay un 99% de posibilidades de que esté en la salida”. Evenepoel también explicó qué falló en la edición pasada, donde comenzó fuerte pero se hundió en los Pirineos con varios días malos seguidos, hasta abandonar.

“La costilla rota en el Campeonato de Bélgica fue un problema menor, pero los entrenamientos que no salían como estaba previsto fueron duros”, explica. “Tenía que parar cada sesión de intervalos a los cinco, seis o siete minutos, cuando debería estar haciendo un bloque de quince o veinte minutos”.

Eso limitó su forma, pero fue la sensación al entrar en los días clave del Tour lo que marcó de verdad. “En un momento dado, volvió ese cansancio extremo. Dormía mal y no tenía apetito. Y entonces, en una Gran Vuelta, está todo perdido.” En aquel momento, el cansancio general fue evidente cuando se descolgó del grupo de favoritos en el Col du Tourmalet, donde puso fin a su Tour.