Alison Jackson ha conseguido coronarse en la París-Roubaix Femmes. La corredora del
EF Education-TIBCO-SVB ha cruzado la línea de meta en primer lugar y se ha llevado una clásica marcada por una caída masiva en la que se vieron involucradas varias de las favoritas a falta de 37 kilómetros para el final.
El podio de la París-Roubaix Femmes lo han completado Katia Ragusa, del Liv Racing TeqFind, y Eugénie Duval, del FDJ-SUEZ.
Se esperaba que la carrera de 145,4 kilómetros fuera caótica, pero pocos habrían esperado la cantidad de drama que tendría lugar en las carreteras que conducen a Roubaix esta tarde. La escapada se formó con 18 corredoras subiendo por la carretera y una diferencia que alcanzó rápidamente más de 5 minutos. En una carrera tan técnica y caótica como ésta, el movimiento fue peligroso, incluyendo a corredoras como Lisa Klein, Alison Jackson y Femke Markus.
Trek - Segafredo se encargó del caso cuando la carrera entró en los numerosos sectores adoquinados - 18 en total -. Marianne Vos sufrió un pinchazo poco después, mientras Daniek Hengeveld subía a la carretera en la escapada para liderar la carrera en solitario. La carrera se mantuvo bastante consolidada hasta que a falta de 51 kilómetros Lotte Kopecky atacó en el pelotón y dividió el grupo cuando la carrera realmente se había puesto en marcha y las corredoras de delante aún tenían una gran diferencia de unos 4 minutos.
Hengeveld fue alcanzada a 44 kilómetros por sus compañeras de escapada, mientras que poco después en el pelotón muchas corredoras se fueron al suelo mientras atacaban. Kopecky, Wiebes, Longo Borghini y otras corredoras se fueron al suelo, desbaratando por completo lo que empezaba a ser una persecución eficaz. La escapada y el pelotón fueron perdiendo corredoras poco a poco, sin que ningún ataque significativo dividiera la carrera.
Sin embargo, a pesar de los grandes esfuerzos de la escapada, las corredoras del pelotón empezaron a recortar distancias casi por completo. Los adoquines no lograron marcar diferencias decisivas, ya que un grupo de siete corredoras abandonó el último sector propiamente adoquinado de Willems à Hem con 10 segundos sobre los restos del pelotón: Femke Markus, Eugénie Duval, Marta Lach, Katia Ragusa, Alison Jackson, Marion Borras y Marthe Truyen.
La diferencia era tan pequeña y a la vez tan grande. El cansancio se dejó sentir tanto en el grupo perseguidor como delante. Los repetidos ataques y los fuertes tirones ocasionales hicieron que la diferencia se mantuviera estable hasta el último kilómetro. Markus sufrió una aparatosa caída ya dentro del velódromo. La escapada logró sobrevivir y Alison Jackson fue la más rápida en el sprint.