El campeón olímpico en ruta de 2016 debutará próximamente en la Unbound Gravel: "La distancia me sacará de mi zona de confort"

Greg van Avermaet se retiró del ciclismo profesional al terminar la temporada pasada, en 2023. Pero a sus 39 años, sigue siendo un amante de la bicicleta. Tras conseguir logros durante su carrera tan grandes como el oro en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro en 2016 o la París-Roubaix en 2017, el belga se va a embaucar en una nueva aventura próximamente, participando en la Unbound Gravel, una carrera de 320 kilómetros conocida por su extrema dureza.

"Me he entrenado al máximo para estar preparado para la Unbound, y estoy deseando competir a este nivel. Llevo varios años pensando en esta prueba y, después de retirarme de la carretera el año pasado, es agradable poder hacer más cosas de aventura como esta y probar algo diferente", dijo Van Avermaet antes de la carrera.

"Me asusta un poco la distancia, y sin duda me sacará de mi zona de confort, pero como ciclista de carretera, siempre fui fuerte en las carreras más largas, de un día, y lo haré lo mejor que pueda e intentaré disfrutarlo todo lo que pueda."

"Todavía tengo que analizar bien el recorrido, pero creo que uno de los factores más importantes para tener éxito en este tipo de carreras es intentar limitar el número de problemas mecánicos y no dejarse llevar por el pánico en caso de tenerlos. Veremos cómo van las cosas, pero tengo muchas ganas".

"Creo que el recorrido, cuando lo vi por las fotos, parece realmente duro, y me asusta un poco. Hay que tener cuidado con la moto. Con la bici de carretera. En los adoquines me manejo bastante bien con la bici", dijo Van Avermaet sobre su experiencia en la Clásica.