En la temporada 2025/26 del ciclocross
femenino, no hay corredora en mejor forma que
Lucinda Brand. La veterana neerlandesa de 36 años está arrasando y ganando casi todas sus carreras. La última de ellas fue la
Copa del Mundo de Namur del domingo pasado, donde decidió salir a competir pese al fallecimiento de su madre a principios de la misma semana.
En declaraciones a In De Leiderstrui, Brand se explicó sobre esta decisión. Con una tranquilidad sorprendente para alguien que ha recibido uno de los golpes más duros que se pueden soportar en la vida,
la ganadora de la Copa del Mundo de Namur fue bastante clara con sus palabras realizadas.
"El mundo no espera a nadie. No tuve dudas sobre competir. Me concentro bien. La verdad es que es genial ir a lo tuyo y estar en tu propio mundo. Una persona normal vuelve al trabajo, así que yo también volveré. Quedarse tirada en el sofá de casa no le hace bien a nadie", comenzó señalando Lucinda Brand.
Lo que sí admitió Brand es que su entrenamiento para Namur fue menos intenso del normal para este tipo de desafíos. Aún así, su profesionalidad se impuso al momento delicado que estaba atravesando personalmente: "Entrené un poco menos, pero eso significa estar más fresca de piernas. En la carrera me vi muy fuerte, me sentí muy bien, y conseguí ganar".
Aunque sea lícito desconectar tras una noticia así, e incluso retirarse de carreras que había en su calendario, Lucinda Brand también señaló que puede que esté en su propio ser el comportarse así ante este tipo de sucesos: "Puede que sea mi naturaleza... Pero lo hago con mucha facilidad, porque estoy concentrada en la carrera. Entonces, otras cosas no me preocupan. Solo es la carrera", concluyó.
Espectacular victoria de Lucinda Brand en la Copa del Mundo de Namur
¿El mejor momento para el Mundial?
Más allá de su vida personal, lo que es seguro es que Lucinda Brand querría que el Mundial de Hulst llegase mucho antes de lo que está programado. Su estado de forma la hace una corredora imbatible en estos momentos.
Pese a que no ganó el Campeonato de Europa (fue medalla de plata), un maillot arcoíris puede, no solo hacer superar aquel varapalo, sino convertir esta temporada en una de las mejores individuales de la historia del ciclocross femenino.