El terreno de Hulst parecía favorable para que
Tom Pidcock luchara por la victoria, pero mientras batallaba con
Mathieu van der Poel en la última vuelta sufrió un problema una caída y abandonó poco después. Posteriormente, habló sobre el incidente.
En declaraciones a Het Nieuwsblad después de la carrera, Pidcock dijo sobre su problema: "Tampoco sé exactamente lo que pasó. Creo que golpeé algo, tal vez ese poste o tal vez algo más. No estoy muy seguro. Mi rueda se rompió después de eso. Anduve un rato, pero todavía estaba lejos, no sirvió de mucho".
Pidcock tuvo una salida más tranquila, y estuvo dentro del grupo de cabeza al principio de la carrera. Entró en la última vuelta sólo unos segundos por detrás de van der Poel, pero reventó su llanta tras chocarse contra las protecciones.
Tras la prueba, cogió la bicicleta de carretera y volvió a casa junto con su hermano Joe Pidcock, que también compitió ese día. "Estaba previsto volver a casa con mi hermano. Hoy el cross se hizo temprano, así que tuvimos esa oportunidad. Creo que son unos 60 km a casa", concluyó.