Mathieu van der Poel saldrá al circuito del
X2O Trofee de Koksijde este jueves por la tarde. Tras el polémico incidente del escupitajo en la Copa del Mundo de Ciclocross de Hulst, que mantuvo al campeón del mundo en el foco mediático, en las próximas semanas se tomarán más medidas para controlar al público.
Antes de la carrera, se le pregunta a van der Poel si ha visto espectadores potencialmente agresivos en Koksijde. "No, pero eso siempre es muy limitado. Y los gritos -que tampoco apruebo- son, por supuesto, diferentes de tirar cosas. No es tan grave, pero es bueno que se le preste atención", responde a Wielerflits. "No soy sólo yo, hay otros corredores que se han quejado de ello. Es bueno que haya cierto control".
Dado que van der Poel tiene fama de experto en arena, ¿espera el neerlandés otra cómoda victoria esta campaña en Koksijde? "No es demasiado pesado, pero es más divertido si la arena es crucial, y no las secciones intermedias que ahora están más embarradas", dice van der Poel, que de hecho perdió en la edición del año pasado contra
Wout van Aert.
"La espalda que ya no me juega malas pasadas. Y sin embargo, quizá Wout esté un poco peor que el año pasado porque opta por un enfoque diferente, lo que también es comprensible. Será una combinación de esas dos cosas", analiza sobre las diferencias entre entonces y ahora. "Aquí no necesitas un plan. Aquí es muy difícil. Normalmente podías recuperar un poco entre las secciones de arena, pero la lluvia también lo impidió, lo que hace que sea una carrera muy difícil".