El Pauwels Sauzen-Bingoal está disfrutando de un gran comienzo de temporada de ciclocross. Sin la presencia de grandes nombres como Wout van Aert, Mathieu van der Poel y Tom Pidcock, el equipo está consiguiendo una victoria tras otra.
"Hicimos todo lo posible para empezar bien, pero fue difícil calcularlo. Ya hemos ganado 11 carreras: eso no es normal. ¿Por falta de competencia? No se puede restar importancia a Laurens Sweeck o Lars van der Haar. Ellos también pueden ganar grandes cruces", dijo Jurgen Mettepenningen.
"Me niego a mirar a diciembre. Ya veremos entonces. La clasificación es importante para nosotros y en ese periodo ya podemos asegurarla más o menos. Preferimos ganarlas todas: Mundial, Superprestigio y X²O. Y queremos un maillot. Tenemos derecho a expresar esa ambición".
Eli Iserbyt es una de las razones por las que el equipo está disfrutando de un gran comienzo de temporada. El ciclista ha ganado las tres pruebas de la copa del mundo que se han disputado hasta la fecha: Waterloo, Fayetteville y Tabor. "Este es también el momento de cosechar, y quiero ganar la Copa del Mundo", dijo Iserbyt.
Confía en su estado de forma: "Mi condición es muy buena y yo mismo estoy un poco sorprendido. Desde marzo hasta finales de junio no pude hacer casi nada y tuve dudas porque septiembre llega rápido", explica Iserbyt.
Aunque también desea el regreso de los grandes nombres, ya que hará más emocionante la competición. "Todo va sorprendentemente bien y a veces el euro cae de la manera correcta. La gente ya está un poco acostumbrada a no estar allí. Pero será divertido cuando vuelvan. Nos enfrentamos unos a otros y conseguimos buenos cruces", concluye el ciclista belga.