Cameron Mason se ha desarrollado con fuerza en los últimos años, y ayer, en el Campeonatos de Europa de Ciclocross, lo dio todo en la pista, estando muy cerca de conseguir la victoria frente a un fuerte contingente de corredores belgas y holandeses.
"Estoy un poco sorprendido por el paso porque sé la fuerza que tenemos ahora mismo en el ciclocross británico con
Tom Pidcock y otros. Pero me siento increíble. Siento que está llegando mi hora y que este resultado ha estado llamando a la puerta durante unos cuantos años", compartió Mason con Cyclingnews. "La gente que lo sabe, lo sabe y lo ve venir. Estoy muy contento de haberlo conseguido hoy".
Mason había demostrado un gran estado de forma al llegar a la carrera, sobre todo con su cuarto puesto en Koppenberg. Los circuitos de subida se le dan bastante bien, pero Pontchâteau era relativamente diferente. Sin embargo, la fuerte lluvia que cayó durante todo el domingo en el Campeonato de Europa de Ciclocross hizo que el circuito estuviera muy embarrado y resbaladizo. En las subidas ya no se trataba de explosividad sino de la capacidad de hacer muchos esfuerzos sentado. Esto fue perfecto para el británico.
"La victoria no estaba muy lejos. Michael tenía el control, pero también mola saber que está ahí y que es el maillot. Pero por ahora, estoy súper contento con mi plata. Cuando lo miré el viernes, pensé que podría ser un poco demasiado para mí, pero cada vez que llovía más me decía, sí esto es bueno para mí, sólo para bajar un poco las velocidades de 25kph a 20kph, eso me conviene mucho más si las subidas son más en el sillín con esa potencia profunda", explicó. "Visteis lo técnico que era ahí fuera, los corredores que cometieron menos errores, realmente les vino bien".
Mason atacó desde el grupo perseguidor después de que Vanthourenhout atacara al principio de la carrera -a la postre por la victoria- y luego se pasó toda la carrera en segunda y tercera posición, mientras Lars van der Haar y Pim Ronhaar sufrían percances debido a las condiciones meteorológicas. Aunque no pudo recortar distancias con el campeón, que defendía con éxito el título, el corredor de 23 años logró un segundo puesto que sorprendió a muchos.
También habló del ex campeón del mundo Tom Pidcock, que encabeza la nueva generación británica, cada vez más fuerte en esta disciplina. "De hecho, le he admirado durante toda mi carrera, es un creador de tendencias, es muy importante tener a gente de tu propio país como él para impulsar el deporte. Si Tom no existiera, quizá yo no estaría aspirando a estas medallas y a estos niveles".
"Los años que pasé con él en el Trinity, aprendí lo que hace a un corredor de este nivel y ahora me estoy convirtiendo en un corredor por derecho propio, estoy deseando volver a verle, será muy divertido". Junto a la victoria de Mason, la nación británica también vio cómo Zoe Bäckstedt, de 19 años, se alzaba con una dominante victoria en la carrera femenina sub-23, en lo que fue otro prometedor resultado para los años venideros.