A
Wout Poels se le da muy bien el Angliru. Las 3 veces que lo ha subido en la
Vuelta a España ha sido protagonista. En 2011 fue segundo en la etapa tras Juan José Cobo. Sin embargo, como el español fue sancionado por doping, la victoria años después fue para él.
En 2017, en la última gran victoria de Alberto Contador, tiró de Chris Froome y casi le amarga el día al madrileño. Hoy, ha destrozado el pelotón, dejando el grupo totalmente roto con
Mikel Landa y los 3 Jumbo-Visma tan sólo a su rueda. No consiguieron el triunfo para
Bahrain Victorious, pero lo intentaron:
"Desafortunadamente hoy no hemos podido ganar, creo que era una buena oportunidad, pero con Mikel en GC teníamos que darlo todo. Todo el equipo estuvo muy bien, ha sido un día bonito. Es muy duro correr contra ellos, pero si no lo intentas nunca ganas, creo que el equipo hizo un gran trabajo, Mikel ha avanzado alguna plaza en la clasificación, así que ha sido un bonito día al final".