Tim Merlier volvió a demostrar su instinto ganador, adjudicándose este miércoles su 16ª victoria de la temporada 2025 en la primera etapa del
Tour de Holanda. El velocista del
Soudal Quick-Step se impuso por un margen mínimo a Olav Kooij en un final tenso y caótico en Dordrecht, donde el triunfo se mezcló con la preocupación.
Pese al éxito, el belga no mostró el entusiasmo habitual y fue contundente en su valoración: la jornada había sido “especialmente peligrosa”. “Para ser sincero, ha sido una etapa especialmente peligrosa, con muchos obstáculos”, declaró Merlier tras cruzar la línea de meta. “Creó mucho nerviosismo en el pelotón, así que no sólo estoy contento con la victoria, sino también por haber llegado de una pieza”.
Desde los primeros kilómetros, el pelotón afrontó un recorrido repleto de trampas: carreteras estrechas, curvas técnicas y tramos urbanos que obligaron a los corredores a mantenerse en tensión constante. Una escapada de cuatro hombres (entre ellos el español Javier Serrano (Team Polti–VisitMalta) y tres ciclistas holandeses espoleados por correr en casa) animó la primera mitad del día, aunque su aventura estuvo siempre bajo control.
En el kilómetro 30, la diferencia con el grupo principal apenas alcanzaba los 40 segundos, con un pelotón vigilante en el que incluso Fabio Jakobsen, la gran estrella local, colaboró brevemente en las tareas de control. Su presencia en cabeza, sin embargo, le excluyó de toda opción de disputar el sprint final.
Con la escapada neutralizada a 22 km de meta, se sucedieron algunos intentos efímeros de ataque, aunque sin éxito. El sprint intermedio de Red Bull, situado a 14 km del final, marcó el último punto de acción antes de que los equipos de los velocistas impusieran su ley y organizaran las formaciones de lanzamiento.
Un final caótico y una victoria al límite
El desenlace fue una cuestión de posición, sangre fría y reflejos. En los últimos metros, el público local rugió cuando Olav Kooij lanzó su sprint de manera prematura, confiando en mantener la ventaja hasta la línea. Sin embargo, Merlier, a pesar de reconocer que no se encontraba en su mejor momento de forma, gestionó su esfuerzo con precisión quirúrgica.
“He ido al límite todo el tiempo”, confesó el corredor belga. “Creo que estoy un poco fuera de forma en estos momentos. El sprint de hoy me ha dejado fuera de combate. Pero una victoria es una victoria. Creo que he ganado más con el ritmo que con mis piernas”.
Tim Merlier suma una nueva victoria más en 2025
La foto de la línea de meta reflejó lo ajustado del desenlace: Merlier imponiéndose por escasos centímetros a Kooij, con Tobias Lund Andresen completando el podio. Para el Soudal Quick-Step, la victoria representó además la número 50 del equipo en la temporada, un dato que el propio Merlier no dudó en subrayar con orgullo.
No obstante, el belga insistió en destacar el alto nivel de riesgo que caracterizó la jornada. “Para ser sincero, fue una etapa especialmente peligrosa, con muchos obstáculos en el camino. Eso creó mucha tensión en el pelotón, así que no sólo estoy contento con la victoria, sino también aliviado por haber llegado de una pieza”.