Este lunes se esperaba muchísima emoción en el
Tour de Francia 2025. En el Día de la Bastilla se disputó la primera gran jornada de montaña, en el Macizo Central, y en la etapa 10 de la carrera. Ello apuntaba directamente a
Tadej Pogacar,
Jonas Vingegaard y
Remco Evenepoel.
Los 3 favoritos al maillot amarillo, que empezó defendiendo Pogacar con 1:17 sobre Vingegaard y 0:55 sobre Evenepoel, protagonizaron su primera lucha. Esta se decidió al final con el danés controlando el ataque que realizó el esloveno, y con Remco minimizando daños. Casi sin cambios en la general.
Por delante, 5 ciclistas de la fuga (Ben Healy, Simon Yates, Thymen Arensman, Michael Storer y Ben O'Connor) se jugaron la victoria de etapa. El ganador del Giro de Italia 2025 se la llevó, y Healy terminó consiguiendo el maillot amarillo al entrar a más de 3:55 de Pogacar (la diferencia que tenía al inicio del día).
Respecto a su desarrollo, al no tener ni un tramo llano, la etapa 10 del Tour de Francia comenzó con muchísima actividad desde el inicio. Múltiples ataques provocaron que, en la primera subida del día (Côte de Loubeyrat) y a 155 km de meta, se empezase a formar una numerosa fuga de 28 ciclistas.
Entre ellos se encontraban Pablo Castrillo, Iván Romeo y Raúl García Pierna como representantes españoles. Pero también Simon Yates y Victor Campenaerts, de Visma, y Valentin Paret-Peintre e Ilan Van Wilder, de Soudal, que obligaron al UAE a acelerar el ritmo desde el principio del día.
El equipo de Pogacar se vio abrumado por este inicio.
Vingegaard tenía a 2 gregarios clave en fuga, y Evenepoel a otros 2, mientras que en UAE Team Emirates XRG Pavel Sivakov se quedó muy pronto en la etapa. No quedaba otra que tirar del pelotón para controlar al grupo delantero, obligarles a esforzarse, y que en el momento decisivo no tuviesen la energía necesaria como para ayudar a sus líderes.
UAE, obligado a tirar todo el día
La etapa se fue desarrollando mientras la fuga coronaba subidas, con Lenny Martínez llevándose todos los puntos, y el UAE tiraba obligado del pelotón. En el Côte de Charade, a 97 km de meta, el grupo escapado se empezó a seleccionar con un ataque de Ben O'Connor.
Como consecuencia, el grupo en cabeza pasó a ser de 19 corredores, con Visma manteniendo a Simon Yates y Victor Campenaerts, Soudal a Valentin Paret-Peintre, y luego ciclistas como Martínez, O'Connor, Pablo Castrillo o Raúl García Pierna (Romeo se terminó quedando).
A 77 km de meta, la etapa ya se encontraba en su segunda mitad, cada vez más dura, y con el pelotón a menos de 4 minutos del grupo escapado. En UAE seguían controlando el ritmo para llegar al momento clave de la jornada teniendo bien posicionado a Pogacar.
El siguiente punto clave de la etapa llegó en el
Col de Guéry, a 53 km de meta. La fuga, de 17 corredores en ese momento, veía que podría llevarse la victoria. La ventaja sobre el pelotón, en ese momento, estaba en los 5 minutos. Para Pogacar, Vingegaard y Evenepoel la lucha iba a ser puramente por diferencias.
En dicha subida, la escapada perdió a algunos corredores más, como Raúl García Pierna, y se redujo a 14 ciclistas. Por detrás, el pelotón consiguió mantener la desventaja en esos 5 minutos. Pero inmediatamente después llegó una nueva ascensión, la del
Col de la Croix Morand.
Allí, un ataque de Ben Healy continuó seleccionado una fuga que, a pesar que ya estaba reducida a solo 12 corredores, Simon Yates y Victor Campenaerts aún se mantenían (también Pablo Castrillo). El pelotón estaba casi a 6 minutos, y la lucha por la victoria, definitivamente, en la fuga.
A 24 km de meta, en fuga solo quedaban para ganar la etapa Quinn Simmons, Ben Healy, Simon Yates, Thymen Arensman, Michael Storer y Ben O'Connor. Por detrás, en el pelotón Visma empezó a acelerar el ritmo, avisando de los fuegos artificiales.
En la penúltima subida del día, el
Col de la Croix Saint-Robert, Ben Healy llevaba un ritmo tremendo porque veía que podía lograr el maillot amarillo (empezó el día a 3:55 de Pogacar y la escapada tenía 5:30 a 14 km de meta). Eso provocó que Quinn Simmons se quedase en la ascensión, reduciendo la fuga a 5 ciclistas.
La penúltima subida se coronó a 10 km de meta, y con la fuga con 6 minutos de ventaja. El maillot amarillo estaba prácticamente asegurado para Ben Healy, pero el irlandés quería también luchar la victoria del día en la ascensión final al Puy de Sancy, que se llevó Simon Yates.
En la batalla entre Pogacar, Vingegaard y Evenepoel, el belga atacó en la subida final, seleccionando aún más el grupo. Los 3 favoritos al maillot amarillo, que empezó defendiendo Pogacar con 1:17 sobre Vingegaard y 0:55 sobre Evenepoel, protagonizaron su primera lucha. Esta se decidió al final con el danés controlando el ataque que realizó el esloveno, y con Remco minimizando daños. Casi sin cambios en la general.