La Clásica Terres de l’Ebre vivirá su segunda edición el próximo 21 de julio, con un recorrido que partirá desde Roquetes y finalizará en Tortosa. La carrera asciende este año a la categoría 1.1 del calendario UCI World Tour, lo que favorecerá la participación de equipos profesionales de primer nivel, consolidando así su proyección internacional. Como en la edición anterior, atravesará las cuatro comarcas del Ebro.
Este evento ciclista de un solo día volverá a recorrer el Baix Ebre, el Montsià, la Ribera d’Ebre y la Terra Alta. La organización está definiendo un recorrido que oscilará entre los 170 y 190 kilómetros. A diferencia del año pasado, el trazado no concluirá en la cima del Mont Caro, aunque se mantendrá igualmente exigente y atractivo.
Con la fecha ya fijada, la Clásica Tierras del Ebro “Reserva de la Biosfera” tomará la salida en Roquetes y culminará en Tortosa. El ascenso a la categoría 1.1 representa una mejora significativa para esta carrera profesional, que atraerá a conjuntos ciclistas de alto nivel internacional.
Desde el Observatorio del Ebro hasta el corazón del Renacimiento
La salida tendrá lugar en Roquetes, en las proximidades del emblemático Observatorio del Ebro. La llegada se ubicará en Tortosa, capital del Baix Ebre, coincidiendo con la Fiesta del Renacimiento. La organización trabaja, además, en la posibilidad de ofrecer una retransmisión televisiva de alcance internacional, aprovechando que ese día será jornada de descanso en el Tour de Francia.
La prueba cruzará distintas localidades del Ebro, poniendo en valor el entorno, así como su riqueza turística, cultural, deportiva y gastronómica. De este modo, se convertirá en una potente plataforma de promoción territorial, con un recorrido variado y apto para todo tipo de aficionados al ciclismo.
El alcalde de Tortosa, Jordi Jordan, subrayó la importancia de recibir una competición ciclista de este nivel: “Lo hacemos en la segunda edición de la Clásica Terres de l’Ebre, que asciende de categoría y que situará a Tortosa y a nuestro territorio en el mapa del ciclismo internacional”. También destacó que la llegada a la ciudad, justo después de la Fiesta del Renacimiento, “será una oportunidad excelente para mostrar al mundo nuestro patrimonio cultural, paisajístico y monumental”. Jordan concluyó asegurando que están “muy satisfechos de formar parte de este evento deportivo, que aúna esfuerzo, territorio y promoción, y que, sin duda, volverá a ser un éxito para todas las localidades por las que pasará”.
Por su parte, Ivan Garcia, alcalde de Roquetes, declaró que “una vez más la ciudad apuesta por el binomio entre deporte y turismo”. Según explicó, una carrera de estas características “permite situar a Roquetes y a las Tierras del Ebro en el panorama mundial”. También puso en valor el papel del Observatorio del Ebro, “una institución centenaria con una labor fundamental en investigación, que se dará a conocer aún más gracias a la prueba”.
La carrera no sería posible sin el apoyo de la Diputación de Tarragona y de la Generalitat de Catalunya. Al acto de presentación también asistieron Montserrat Pegueroles, delegada territorial de Deportes en las Terres de l’Ebre, y Enric Adell, vicepresidente de la Diputación de Tarragona.
Pegueroles expresó que “la Generalitat está muy satisfecha de respaldar eventos como este, que ayudan a proyectar el territorio y a dar visibilidad a la riqueza de las cuatro comarcas ebrenses y su enorme potencial turístico y deportivo”. Añadió que esta segunda edición supone “la consolidación de la Clásica, con la esperanza de que tenga continuidad durante muchos años más”.
Por su parte, Enric Adell destacó que “desde la Diputación de Tarragona llevamos años apostando por el cicloturismo, el turismo de calidad y la promoción de nuestro territorio, y esta carrera, que además ha subido de categoría, encaja perfectamente con estos objetivos”. Subrayó que será una prueba “preciosa, que recorrerá las cuatro comarcas y mostrará una vez más las Terres de l’Ebre al mundo”, reafirmando que “somos un territorio lleno de encanto y oportunidades, y debemos seguir promoviendo eventos deportivos internacionales que contribuyan a nuestra proyección global”.
Finalmente, Néstor Biosca, presidente del Club Deportivo Montsià y principal impulsor de la carrera, manifestó su satisfacción: “Estoy muy contento porque las instituciones se han implicado y reconocen el enorme potencial de esta prueba para la promoción del territorio”. Recordó que organizar lo del año pasado “no fue sencillo”, y celebró que la UCI haya reconocido ese esfuerzo con el ascenso a la categoría 1.1, “la misma que tienen otras competiciones muy consolidadas en el calendario”. Añadió que este año también han contado con el apoyo de la P.C. Baix Ebre, con el objetivo de seguir creciendo y consolidando tanto la carrera como el ciclismo en una zona “fantástica en todos los sentidos, pero especialmente idónea para practicar este deporte en cualquiera de sus modalidades”.