Tadej Pogacar explica lo especial que ha sido la victoria en el Giro dell'Emilia: "Llevaba mucho en mi lista de deseos"

A sus 26 años, Tadej Pogacar lo ha ganado prácticamente todo. Sin embargo, esta temporada aún no había conseguido la victoria ni en el Mundial ni en un Giro dell'Emilia donde había quedado 2º en las dos últimas ediciones de la carrera.

En su debut con el maillot arcoíris, Pogacar realizó una carrera estelar para ganar la clásica italiana con otro largo ataque en solitario. El corredor del UAE Team Emirates está imparable este año.

"Esta carrera ha estado en mi lista de deseos durante mucho tiempo. Era una oportunidad de oro. Estoy en plena forma y con este tiempo suelo rendir muy bien", declaró Pogacar a Het Laatste Nieuws. "La idea era aumentar sistemáticamente el ritmo hacia las dos últimas vueltas, para poder atacar allí. Pero incluso antes del circuito local, Lidl-Trek corrió de forma muy agresiva, lo que hizo que la carrera estallara pronto. En San Luca, Remco 'provocó' por un momento".

Con la lluvia cayendo con fuerza, el recorrido favoreció a los primeros atacantes, ya que sería muy difícil organizar una persecución - y con la mayoría de los principales favoritos no pudiendo rendir a su nivel habitual. "Seguí un gran ataque de un corredor del Astana desde atrás. Sólo Matteo Jorgenson intentó pegarse a mi rueda. Lo entendí. En estas condiciones tan duras y explosivas no pude esperar más. Decidí seguir adelante".

En esas condiciones y ante un corredor tan fuerte, simplemente no era posible seguir al esloveno. Jorgenson no tenía el ritmo, y en cuanto se acumuló la diferencia fue imposible recuperarla. Incluso podría decirse que, a pesar del brutal recorrido, fue una de las victorias más fáciles de Pogacar este año, ya que incluso bajó considerablemente el ritmo en la subida final a San Luca y aún así llegó con casi dos minutos sobre el segundo clasificado, Tom Pidcock.

"Los primeros días después de mi título mundial intenté desconectar un poco en casa, disfrutar un poco de la vida normal. Pero luego vine aquí, recibí mi nuevo paquete de ropa y mi nueva bici, los patrocinadores vinieron a visitarme y sí, la presión aumentó", concluyó. "'Tienes que rendir', me dije. Y lo hice. Me sentí muy bien. Los incontables aficionados me animaron enormemente. Me apoyaron bajo una lluvia torrencial. Esto es por ellos".