"Se está haciendo viejo": Un ex rival de De Vlaeminck, sobre sus críticas a Pogacar y Van der Poel

En los últimos días, unas declaraciones de Roger de Vlaeminck se han viralizado. La leyenda del pasado se cebó con Tadej Pogacar, sobre todo, y también con Mathieu van der Poel y Remco Evenepoel. Por eso, un antiguo rival suyo, Riccardo Magrini, se ha pronunciado al respecto, defendiendo a las estrellas del pelotón actual.

En unas declaraciones, el icono de 78 años rechazó las comparaciones entre Pogacar y Merckx, y lo hizo con la contundencia que sólo De Vlaeminck puede ofrecer: "¡Tonterías! Pogacar no está ni a la altura de Merckx. Si yo hoy tuviera 22 años y corriera en el pelotón con él, no me dejaría tirado".

Además, sobre Van der Poel dijo lo siguiente: "No sabe hacer contrarrelojes, no sabe escalar, no sabe esprintar... no queda mucho después de eso".

En declaraciones a QuiBiciSport, Magrini, que corrió junto a De Vlaeminck a finales de la década de 1970 antes de desarrollar una exitosa carrera como director deportivo y ahora comentarista de Eurosport, dijo que encontraba los comentarios "completamente fuera de lugar".

"Siempre he tenido un gran respeto por Roger como ciclista, y también teníamos una buena relación personal. Pero sus comentarios sobre Pogacar me parecen totalmente fuera de lugar. Es absurdo comparar épocas diferentes. Han cambiado demasiadas cosas: el cambio de marchas, el entrenamiento, la nutrición. Merckx era Merckx, Hinault era Hinault, Pogacar es Pogacar. Y punto".

"Quizá Roger se esté haciendo un poco viejo, digámoslo así. Cuando te haces mayor, tiendes a centrarte sólo en lo que has hecho tú mismo. Personalmente, me gusta mucho el ciclismo moderno y me gusta mucho ver a Pogacar. No entiendo a los que dicen que no tiene rivales o que hace que las carreras sean aburridas. El ciclismo moderno está lleno de corredores fenomenales".

"La gente se olvida de lo rápido, táctico y físicamente exigente que es el deporte moderno. El pelotón es más profundo que nunca, y no es fácil dominar como lo hace Pogacar".

Para Magrini, todo el debate sobre si Pogacar podría igualar a Merckx -o si el propio De Vlaeminck podría seguir el ritmo de Pogacar- es fundamentalmente erróneo.

"Es como preguntarse cómo se desenvolverían Maradona o Sívori en el fútbol actual, contra las defensas modernas. Roger fue un campeón, y estoy seguro de que lo habría sido en cualquier época, pero no tiene sentido preguntarse si aguantaría el volante de Pogacar. Prefiero limitarme a disfrutar de los campeones de hoy como disfruté de los del pasado".

Mientras que la franqueza de De Vlaeminck sigue siendo una parte definitoria de su leyenda, la respuesta de Magrini subraya una verdad diferente: que el deporte que él y Merckx ayudaron a moldear hace medio siglo sigue produciendo corredores cuya brillantez merece ser valorada por sí misma, no siempre en comparación con el pasado.