Perfil y ruta de la Heistse Pijl 2024

El 1 de junio marca el calendario con otra emocionante carrera belga de un día, la Heistse Pijl. Este evento anual atrae tanto a los corredores de clásicas como a los velocistas, quienes tienen sus ojos puestos en el premio en esta prueba desafiante. Para comprender mejor las expectativas y desafíos que enfrentarán los ciclistas, echamos un vistazo más detallado a su perfil.

La Heistse Pijl presenta un recorrido de 195 kilómetros que, en su mayor parte, es llano. Sin embargo, este terreno engañosamente sencillo oculta una trampa táctica que puede ser decisiva. La única subida significativa del recorrido se encuentra en un punto estratégico donde puede alterar el desarrollo de la carrera.

El núcleo de la acción se centra en el circuito final en Heist-op-den-Berg. Aquí, los ciclistas enfrentarán la subida al Heistseberg, un tramo de 500 metros adoquinados con una pendiente del 3,6%. Aunque esta subida no parece intimidante por sí misma, su ubicación y características la convierten en un factor crítico.

Los corredores darán seis vueltas a este circuito, lo que significa que tendrán que afrontar la subida al Heistseberg repetidamente. La cima de esta subida se encuentra a solo 700 metros de la meta, lo que añade un elemento táctico crucial. Cada ascenso desgastará a los ciclistas, y las decisiones estratégicas sobre cuándo atacar o conservar energía serán vitales.

Para los velocistas, la clave estará en resistir los repetidos ascensos al Heistseberg y posicionarse bien para el sprint final. La carrera puede favorecer a aquellos con la capacidad de escalar breves colinas sin perder velocidad. Los corredores de clásicas, por otro lado, buscarán aprovechar las subidas para desgastar a los velocistas y lanzar ataques decisivos en el momento justo.