La lucha "contra" el
doping de la
UCI no puede ser tomada en serio. Es muy complicado tomarnos el deporte que amamos en serio teniendo en cuenta que Michel Hessmann no fue despedido por Visma tras dar positivo y luego la Agencia Antidopaje Alemana dio un veredicto cuanto menos discutible. Ahora llega lo de
Robert Stannard cuyo caso es bastante claro: se dopa, lo pillan 4 años después, lo echan del equipo, no cumple la sanción porque los 4 años ya han pasado y firma por
Bahrain Victorious.
Es absolutamente tremendo. Es, de hecho, increíble. El Tribunal Antidoopaje de la UCI determinó que hubo anomalías en su pasaporte biológico entre 2018 y 2019. Como se le detectó la "anomalía" el 17 de agosto de 2018, la UCI le sancionó desde ese momento hasta agosto de 2022. Apenas ha estado un año fuera por sanción retroactiva desde que le pillaron y, como comentan desde
Marca, aparece inscrito en el Bahrain Victorious. Básicamente el premio por doping es acabar firmando por un equipo mejor en el que estabas.
Todo en orden....