España es una de las grandes naciones en la historia del ciclismo. El
Tour de Francia es, con diferencia, la carrera más prestigiosa del mundo. A falta de unos días para el inicio de la edición de 2025, vamos a repasar los momentos más inolvidables, hazañas increíbles y etapas para el recuerdo que nos han dejado los ciclistas españoles en esta prueba.
El próximo sábado 5 de julio arrancará el Tour de Francia 2025 y será una nueva oportunidad de ver a los mejores corredores del mundo en acción. Parece difícil que veamos algún hito de un español, aunque Enric Mas y Carlos Rodríguez estarán presentes para intentarlo.
Sin embargo, todos recordamos lo que hicieron
Luis Ocaña, ganador en 1973;
Miguel Induráin, 5 veces vencedor de la prueba;
Alberto Contador, maillot amarillo en 2007 y 2009; o
Carlos Sastre, triunfador en 2008. Es por ello que os vamos a dejar a continuación con las 5 grandes hazañas de nuestros hombres más fuertes en la historia del Tour.
1. Luis Ocaña hace tambalear a Eddy Merckx (1971)
Luis Ocaña llegaba al Tour de Francia 1971 como uno de los grandes candidatos para subirse al podio final de la carrera. El máximo favorito no podía ser otro que Eddy Merckx, el mejor del mundo en esos momentos. Ocaña venía de ser podio en la París-Niza, la Vuelta a España (cuando se disputaba en los meses de abril y mayo) y el Critérium du Dauphiné Libéré y de ganar la Itzulia.
Se hizo con la victoria de etapa en el octavo día de competición, en el Puy de Dôme, dejando caer que estaba bastante en forma. Apenas tres días después, en una corta jornada de 134 kilómetros entre Grenoble y Orcières, un día antes de la segunda jornada de descanso, Ocaña le metía 5:52 a Lucien van Impe y 8:42 a Eddy Merckx, haciéndose con el maillot amarillo con 8:43 de ventaja con respecto a Joop Zoetemelk y y 9:46 sobre Merckx, que se situaba quinto.
Pero el sueño de los Alpes se iba a transformar en una pesadilla en los Pirineos. Siendo líder de la clasificación general con una ventaja consecuente con el resto, Ocaña se fue al suelo en el Col de Menté, en un descenso afectado por la lluvia. Esta dura caída le provocó la obligación de tener que abandonar la carrera, aplazando su primera victoria en el Tour para dos años después. No lo consiguió en 1971, pero se tomó la revancha en el 73.
2. La exhibición de Miguel Indurain en la crono de Luxemburgo (1992)
Miguel Indurain venía de ganar el Tour de Francia 1991. Al año siguiente, era el gran favorito para revalidar su título. Sin embargo, su primera semana había estado por debajo de las expectativas. Aunque como experto en contrarreloj, el navarro aprovechó perfectamente sus características para dar un fuerte puñetazo sobre la mesa en la 9ª etapa, en Luxemburgo.
Ese día, Indurain le metió 3 minutos al segundo clasificado, su compañero de equipo de aquel entonces en el Banesto, Armand de las Cuevas. Si nos vamos a sus principales rivales de cara al maillot amarillo, le endosó 3:41 a Gianni Bugno y 5:26 a Claudio Chiappucci, más de lo que le sacó en la clasificación general final.
Esta exhibición de 65 kilómetros está considerada simple y llanamente como una de las mejores actuaciones en una contrarreloj individual en la historia del Tour de Francia y del ciclismo en general.
Miguel Indurain, en plena contrarreloj
3. Miguel Indurain saca todo su poderío en la montaña de Hautacam (1994)
Miguel Indurain reventaba las cronos y, en la montaña, se limitaba a aguantar lo máximo posible. En el Tour de Francia 1994, ya llevaba tres victorias consecutivas en la clasificación general final y aspiraba a una cuarta. Había arrasado a sus rivales en su ejercicio preferido, pero llegaba la temible etapa de Hautacam.
Lejos de amedrentarse, Indurain se puso a imprimir un fuerte ritmo, tomándoselo como una contrarreloj y cortando la respiración de sus principales rivales al maillot amarillo. En la línea de meta fue únicamente superado por Luc Leblanc, pero le metió 16 segundos a Marco Pantani, 54 a Richard Virenque y 1:24 a Piotr Ugrumov.
Esto hizo que su ventaja en la general aumentase, sacándole 4:47 a Tony Rominger y 5:36 a Armand de las Cuevas, segundo y tercero respectivamente en ese momento.
Miguel Indurain, con el maillot amarillo del Tour de Francia
4. Carlos Sastre gana el Tour en el Alpe d'Huez (2008)
La victoria de Carlos Sastre en el Tour de Francia 2008 es una de las mayores sorpresas en la historia reciente de la carrera y para el ciclismo español. El madrileño se presentaba como gregario de lujo para los hermanos Andy y Frank Schleck, pero la situación de carrera quiso que finalmente se convirtiera en el jefe de filas del equipo CSC ProTeam.
En la etapa 17, la del temido Alpe d'Huez, el mayor de los Schleck (Frank) tenía el maillot amarillo. Contaba con 7 segundos de ventaja sobre el austríaco Bernard Kohl y 8 con respecto a Cadel Evans, el principal favorito a la victoria final. Sastre estaba a 49 y lo aprovechó perfectamente, usando las tácticas del equipo a su favor.
Atacó desde abajo y se hizo con la victoria de etapa, metiéndole 2:03 a Samuel Sánchez, 2:13 a Alejandro Valverde y 2:15 a Cadel Evans y Denis Menchov, todos perfectamente controlados por los hermanos luxemburgueses. Esto hizo que Sastre se colocara el amarillo con 1:24 de ventaja sobre Frank Schleck, 1:33 con respecto a Kohl y 1:34 sobre Evans, una diferencia que le valió para subirse al primer puesto del podio en París.
Carlos Sastre junto a Lance Armstrong en un Tour de Francia
5. ¿Jugarreta o inteligencia? El ataque a traición de Alberto Contador a Andy Schleck (2010)
Alberto Contador dominaba el Tour de Francia. Ganador en 2007 y 2009, no lo consiguió en 2008 porque el Astana no fue invitado. Como consecuencia, el de Pinto decidió correr el Giro de Italia y la Vuelta a España, ganando las dos clasificaciones generales finales y demostrando que era el mejor ciclista de Grandes Vueltas del momento.
Aquí volvía a ser favorito, a pesar de la subida de nivel de su por entonces rival Andy Schleck. Llegaron a la etapa 15 con 31 segundos de ventaja para el luxemburgués. En el Port de Bales, última dificultad del día, un puerto de montaña de categoría especial de casi 20 kilómetros, Schleck atacó, pero se le salió la cadena.
Lejos de esperarlo, Contador decidió que era el momento de aprovecharlo y marcharse. En la línea de meta le sacó 39 segundos, lo que le permitió hacerse con el maillot amarillo por 8 segundos. En el podio fue abucheado y pidió disculpas, pero ya era tarde, ganaría el Tour de Francia unos días después. Sin embargo, dio positivo en dopaje al tiempo y fue despojado de varios títulos, entre ellos ese Tour de 2010, que acabó en manos de Andy Schleck.
Alberto Contador, ganándole una etapa a Michael Rasmussen el Tour de Francia 2007