Tre Valli Varesine 2025 se ha convertido en un trofeo más en el extenso palmarés de
Tadej Pogacar. Sin embargo, por detrás de él, el segundo puesto fue para el hombre que bien podría convertirse en su sucesor en las clásicas:
Albert Philipsen. El joven prodigio de 19 años del
Lidl-Trek consiguió esprintar hacia un segundo puesto desde el grupo que se formó detrás del líder en solitario.
"Ha sido una carrera realmente dura. Al principio no me sentía muy bien, todavía estaba afectado por el cansancio de ayer", se refería Philipsen a la Coppa Bernocchi de ayer en la meta, "pero en algún momento conseguí superarlo. El equipo volvió a trabajar muy bien, y me mantuve en una buena posición durante todo el día. Ha sido una experiencia realmente enriquecedora".
"Hoy queríamos correr con agresividad. Quinn (Simmons) ha estado muy fuerte durante toda la carrera, pero por desgracia no ha podido aguantar hasta el final. Aun así, hemos seguido empujando y he terminado segundo. No me lo esperaba en absoluto, estoy muy contento con este resultado".
Para la estrella emergente, es el mejor resultado profesional del día, superando ligeramente el tercer puesto de la general en el Tour de Hongrie. Pero si Philipsen sigue mejorando a este ritmo, tiene garantizado reemplazar este segundo puesto con una gran victoria en poco tiempo.
En su primera temporada profesional, Albert Philipsen ha disputado 37 carreras hasta la fecha, con una más prevista para este domingo con la París-Tours. La carrera 1.Pro con sectores de grava en viñedos cerca de la ciudad de Tours debería sentarle como un zapato al campeón junior de bicicleta de montaña y sin duda es un objetivo para competir por la victoria en algún momento del futuro, si no ya esta semana.
"¿Y ahora? Voy a tomarme unos días de descanso, y luego competiré en la París-Tours el domingo", concluyó, confirmando que Il Lombardia no formará parte de su calendario en 2025, aunque cada vez está más claro que Philipsen no carece de las cualidades adecuadas para la Clásica de las hojas caídas.