Mischa Bredewold fue la carta que utilizó Países Bajos para ganar el
Campeonato de Europa de fondo de carretera femenino. Una mezcla de táctica y tremendas habilidades de rouleur condujeron un ataque inesperado para crear la jugada ganadora.
"Parece que estoy soñando, no me lo puedo creer. El plan no era atacar en la última vuelta. No sé, como equipo llevábamos un rato en modo ataque. Vi mi momento y me fui. Luego tuve que cambiar y seguir dando", dijo Bredewold en una entrevista posterior a la carrera. La corredora del Team SD Worx consiguió la victoria más importante de su carrera gracias a una combinación de buenas piernas y a la profundidad del equipo neerlandés. Su ataque se produjo con un pelotón ya reducido a falta de 9 kilómetros, que no tenía a nadie que le siguiera a rueda.
"También fue bueno para Lorena Wiebes y Demi Vollering que yo rodara delante, porque las demás tuvieron que perseguirme", dijo. Shirin van Anrooij, Riejanne Markus y Vollering cubrieron todos los ataques por detrás y dejaron que la diferencia creciera considerablemente. Al entrar en el Col du VAM tenía la victoria en su mano, aunque sus propias compañeras de equipo la persiguieron para preparar un esprint para Lorena Wiebes. Pero Bredewold aún tenía suficiente en el depósito. "Joder, tengo que darlo todo, porque puedo ganar de verdad", pensó.
Tras su victoria en el GP de Plouay, la joven de 23 años continúa su progresión en el mundo del ciclismo. "Esto significa mucho para mí. Los últimos años no siempre han sido fáciles. El hecho de estar ya aquí es muy bonito. No tengo palabras para describirlo", concluyó, tras haber podido compartir el podio con sus compañeras del SD Worx Lorena Wiebes y Lotte Kopecky.