Michael Boogerd se pregunta si el equipo femenino neerlandés será capaz de formar una unidad en la carrera en ruta del domingo. En De Telegraaf, el ex corredor cuestiona las relaciones mutuas entre las ciclistas y el seleccionador nacional Loes Gunnewijk.
"No formo parte de ello, por supuesto, pero no tengo la impresión de que sea uno para todos y todos para uno con las mujeres. Eso no es fácil cuando hay tantas corredoras de primera", dice Boogerd, que en la carrera masculina vio a un equipo totalmente unido por Mathieu van der Poel.
"Annemiek van Vleuten y Anna van der Breggen no han tomado café juntas, y Van Vleuten y Vollering tampoco son las mejores amigas. Eso no tiene por qué forjar una unidad, pero entonces sí se necesita una personalidad fuerte como seleccionador nacional. Loes Gunnewijk no es eso a mis ojos. Hemos visto con demasiada frecuencia que es un desastre táctico, sobre todo porque nunca está realmente claro quién tiene qué tareas".
En la pista de Glasgow se necesita unidad, especialmente con Lotte Kopecky como gran rival del equipo neerlandés. "Si quieren superar a Kopecky, tendrán que demolerla como equipo", piensa Boogerd. El analista prefiere a Vollering como líder. "Vollering demostró en primavera que puede poner en aprietos a todo el mundo en agotadoras carreras de un día, esa es por sí sola una razón para situarla en lo más alto de la escala jerárquica de este equipo neerlandés".