En 2025,
Pauline Ferrand-Prévot ya ha escrito dos capítulos memorables en la historia del
ciclismo femenino: la conquista del Tour de Francia Femenino y la victoria en la Paris-Roubaix Femenina. Sin embargo, la campeona francesa no se conforma.
A sus 33 años, la ícono nacional confiesa que todavía tiene hambre de más y fija su mirada en la carrera de ruta del
Mundial, que se disputará este sábado en Kigali. Durante la semana, Ferrand-Prévot recorrió por primera vez el circuito mundialista en Kigali y salió con sensaciones sorprendentes.
“Puedes ver que va a ser muy duro, pero para ser honesta, esperaba subidas un poco más largas”, declaró en entrevista con
L’Équipe. “En cambio, es un circuito muy explosivo y urbano, con muchas curvas. Hay dos subidas importantes que serán muy difíciles, pero aún necesitarás mucha potencia. Me recuerda un poco al Tour de Flandes. Necesitarás energía y fuerza hasta el final”.
Con 11 vueltas que suman más de 160 kilómetros, el desgaste está garantizado. “Al final esas dos subidas realmente van a doler”, añadió. “Así que me sorprendió bastante el circuito, pero de una buena manera, porque es el tipo de carrera que disfruto. Creo que me conviene bastante bien”.
Preparación en altitud y adaptación a Kigali
Consciente de la altitud de la capital ruandesa y de su clima húmedo, la francesa llega con una preparación específica en su bolsillo. “Habiendo entrenado en altura antes de los campeonatos, creo que tengo las bases fisiológicas para soportar el aire fino y las condiciones húmedas de Kigali”, explicó.
“Hasta ahora ha sido bastante estable, aunque aún no he empujado mi cuerpo al límite. He hecho algún trabajo de intensidad y ha ido bastante bien. Después de mi campamento de tres semanas en altitud no me siento afectada por la altitud ni nada más, me siento en buena forma. Creo que mi cuerpo está acostumbrado a rendir a la altura. Puede haber algunas fluctuaciones el sábado, pero son cosas que no puedes controlar”.
El 2025 de Ferrand-Prévot ya está grabado en letras doradas. Su rotunda victoria en el Tour de Francia Femenino, combinada con su histórico triunfo en la París-Roubaix Femenina, la han consagrado como una de las protagonistas indiscutibles de la temporada.
Pauline Ferrand-Prévot ganó la París-Roubaix 2025
Pero el camino hacia el Mundial no estuvo libre de dificultades. “La transición del Tour de Francia fue dura porque había muchos compromisos y cosas que tenía que hacer, lo que significaba que la recuperación era inevitablemente menor que la ideal”, admitió.
“No estoy en la misma condición que en el Tour, pero eso es cierto para todas. Es el final de la temporada, todas están un poco cansadas, todas están un poco mentalmente desgastadas, todas estamos en la misma situación. No tuve la misma preparación óptima que para el Tour, pero aún así hice el trabajo hasta el final, y estoy aquí en buena forma. Veremos si es suficiente”.
Ahora, en Kigali, se le presenta la oportunidad de añadir un título mundial en ruta a su impresionante lista de logros de 2025. Una victoria que transformaría una temporada ya sobresaliente en una de las más grandiosas de la historia moderna del ciclismo femenino. “Estoy en buena forma”, concluyó con serenidad. “Veremos si es suficiente”.