Matthew Riccitello apunta alto en las Grandes Vueltas: "Quiero acabar en el podio en los próximos dos años"

Ciclismo
lunes, 17 marzo 2025 en 3:30
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Matthew Riccitello es una de las grandes esperanzas para el futuro del ciclismo estadounidense. El joven escalador de 23 años del Israel - Premier Tech tiene también fuertes aspiraciones de cara al futuro. Su objetivo más cercano es terminar en el podio de una Gran Vuelta de aquí a dos temporadas.

El ciclismo no fue el único deporte que practicó Riccitello en su juventud, pero pronto se convirtió en su pasión. "Al crecer, siempre estaba rodeado de deporte, y el Tour de Francia siempre estaba en la tele en verano. De joven practicaba muchos deportes: baloncesto, atletismo, natación. Empecé con el ciclismo a los 13 o 14 años. Enseguida me gustó más que cualquier otra cosa. Progresé rápidamente", recuerda para Rouleur.

Aunque destacó en la mayoría de los deportes de resistencia, fue la sensación de libertad y exploración lo que le atrajo del ciclismo. "Me gustaba poder estar más tiempo al aire libre y ver mucho más que corriendo o nadando en una piscina mirando la línea negra del fondo".

Riccitello es hijo del ex triatleta profesional y campeón del mundo de XTerra Jimmy Riccitello, pero su padre nunca le empujó a practicar el ciclismo. "Mi padre no me empujó a empezar con el ciclismo. Probablemente fue el último de los tres deportes que quería que practicara, porque es el que entraña más riesgos. Pero sin duda me ayudó tenerle a él para montar en bici, y él estaba rodeado de muchos ciclistas", explica Riccitello. "Me facilitó aprender los entresijos de las bicicletas, qué llevar y qué esperar cuando se va a las carreras".

Riccitello forma parte de un grupo estable de talentos procedentes de Estados Unidos en estos momentos, un país que lleva varios años buscando desesperadamente talentos en el pelotón. ¿Podría Riccitello estar entre los más brillantes?

A pesar de su progresión constante, Riccitello nunca dio el éxito por sentado. "Sabía que podía llegar a profesional, pero siempre fui consciente de que existía la posibilidad de que no fuera así, así que intenté concentrarme en la escuela y en otras cosas", afirma. "Hoy en día, los más jóvenes ven a los demás hacerlo bien enseguida, y eso les presiona. No sé hasta qué punto es saludable. Muchos de los júniors con los que corrí fueron a la escuela secundaria en línea, pero yo me quedé en la escuela normal, lo que me obligó a entrenar después de las clases. Fue duro, pero mejoró cuando por fin pude entrenar a tiempo completo como mi trabajo".

Su enfoque del desarrollo gradual también se extendió a los equipos para los que corrió, especialmente durante sus años junior con LUX Cycling, un equipo de desarrollo estadounidense. "Sabían encontrar el equilibrio entre intentar instruirnos y guiarnos, pero también dejarnos que descubriéramos muchas cosas por nuestra cuenta. Hacían mucho hincapié en que nos divirtiéramos fuera de la bici".

Mientras que algunos de los mejores juniors pasan directamente a las filas profesionales, Riccitello cree que el tiempo que pasó corriendo en la categoría sub-23 le ayudó en su transición. "Me gusta mucho el ciclismo, así que si puedo alargar mi carrera en lugar de acortarla, mejor. También quería participar en carreras sub-23, como el Baby Giro y el Tour del Porvenir", explica. "Si eres júnior y pasas directamente a un equipo profesional, a algunos júnior les resulta difícil llevarse bien con sus compañeros de equipo durante los primeros años, porque no saben cómo interactuar con ellos. Hay diferentes niveles de madurez, y eso puede ser más importante que el aspecto físico. Creo que ahí es donde entran los equipos sub-23".

Sus actuaciones en 2023 y 2024 ya han confirmado su potencial, dándole la confianza de que pertenece al más alto nivel. "Siempre creí que tenía el talento físico para estar ahí arriba en las subidas, pero ver tu nombre en las hojas de resultados te da un poco más de confianza. Mis resultados en el Giro y en Suiza fueron la confirmación de que podía estar ahí arriba con esos hombres", reflexionó.

A pesar de su éxito, Riccitello mantiene los pies en la tierra, sabiendo que aún tiene mucho margen de mejora. "No me presioné para hacer las cosas tan pronto, pero pensé que era posible. Todavía tengo muchas áreas en las que puedo mejorar como ciclista, y eso es lo que más me entusiasma. Soy un desarrollador tardío físicamente, así que aunque estos resultados son agradables, de momento me tomo las cosas como vienen."

Uno de los aspectos que espera mejorar es su eficacia en carrera, sobre todo en las carreras por etapas largas. "Todos los días en una carrera por etapas hay mucho estrés y nerviosismo. A menudo gasto demasiada energía para llegar a la subida, por ejemplo, así que puedo aprender a ser más económico y a pedalear en un lugar en el que esté protegido. Además, a medida que me haga mayor y me desarrolle más, el motor será más grande y progresaré físicamente cada año".

Esa dedicación a mejorar es lo que alimenta sus ambiciones, y sigue plenamente comprometido con la persecución de sus mayores objetivos. "Cuando oigo algo así, me siento más motivado y entusiasmado que con cualquier otra cosa. Es algo que definitivamente creo que se puede conseguir, y es lo que hace que me guste tanto entrenar cada día".

De cara al futuro, Riccitello tiene claros sus objetivos para la temporada 2025, especialmente en la Vuelta a España, donde espera seguir progresando. "Quiero ir a la Vuelta e intentar no tener ningún día malo. Quiero ser constante y estar donde tengo que estar, y luego el resultado será bueno".

Sin embargo, su último sueño va más allá de competir en Grandes Vueltas, quiere luchar por los mayores premios de este deporte. "A largo plazo, las Grandes Vueltas son lo que más me apasiona de este deporte, y quiero acabar en el podio de una de ellas en los próximos dos años. Ése es mi objetivo".

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