Marc Reef admite la dificultad para Roglic y Vingegaard de gestionar sus egos: "Los dos vinieron a la Vuelta con la intención de ganar"

Después de mucho debate y deliberación en las redes sociales, en la televisión y dentro del propio equipo, parece que Jumbo-Visma se ha decidido finalmente por Sepp Kuss como el hombre que llevará a su equipo a Madrid como ganador de la Vuelta a España 2023.

A pesar de que lo más importante es que la victoria se quede en el equipo, para Jonas Vingegaard y Primoz Roglic debe haber un matiz de decepción, como admite el director deportivo del Jumbo-Vimsa, Marc Reef. "Por supuesto que es difícil para ellos dos, porque ambos vinieron a la Vuelta con la intención de ganar la clasificación", explica a Eurosport.

En la 18ª etapa, Roglic y Vingegaard dejaron de atacar, y se decretó un alto el fuego en el equipo. "Después de lo que Sepp ha hecho por ellos, han demostrado en la carretera que más o menos han devuelto todo ese trabajo", dice Reef. "Hemos acabado en esta situación, estamos orgullosos de ello y hemos trabajado duro para conseguirlo. Todo el equipo es muy fuerte aquí".

"Hemos luchado mucho por ello en las últimas jornadas. Nuestra intención era crear un hueco, ahora tenemos esa diferencia deseada. La carrera aún tiene que disputarse, pero esos tres pueden demostrar cómo quieren disputarla ahora", concluye Reef. "Veremos el sábado cómo se desarrolla la carrera. Si nuestra intención y el sentimiento entre los pilotos sigue siendo el mismo, Kuss puede seguir siendo el líder. Sin embargo, la carrera aún está por disputar y no vamos a revelar cuáles serán nuestras tácticas de carrera el sábado".