Lennert van Eetvelt es uno de los corredores con más talento del pelotón y comparte el liderazgo del Lotto con Arnaud De Lie. Por eso, supone un gran contratiempo para el equipo belga que, por segunda temporada consecutiva, el joven sufra una lesión que le lastra durante toda la primavera. Tal como está la situación, disputará la
Lieja-Bastoña-Lieja con un pie roto, y ya ha corrido el Tour de Flandes en esas condiciones.
"La Vuelta a Cataluña fue la primera carrera en la que me sentí realmente en forma. Quedé satisfecho con mi rendimiento, aunque el resultado no reflejó lo que podría haber conseguido. Pero dos días antes del Tour de Flandes me rompí el pie, lo que tampoco ayudó", explicó Van Eetvelt en una entrevista con Wielerflits. "Y en el propio Tour, la miseria continuó".
El ciclista de 23 años disputó tanto el Tour de Flandes (que no logró terminar) como la Flecha Valona con el pie roto, y seguirá compitiendo pese a ello. "El problema es que sigo con el pie fracturado. No hay solución para eso. Me siento bien entrenando, pero si apenas compites, es difícil valorar tu nivel real".
Aunque ha recibido el visto bueno médico para entrenar y correr, no hay duda de que su condición física se está viendo afectada. De hecho, fuera de la bicicleta, aún necesita caminar con una bota especial que le inmoviliza el pie.
"¿Sinceramente? Ya estoy contento con poder tomar la salida en Lieja", admite, dadas las circunstancias. "Ya me pasó algo similar dos años seguidos, pero sobre el papel, es una carrera que debería adaptarse bien a mis características. Me daré por satisfecho si puedo volver a estar en cabeza. En secreto, espero acabar entre los diez primeros; en condiciones normales, eso debería ser siempre posible. Pero tal como estoy ahora, no puedo contar con ello".
Pocos días después de Lieja, el apretado calendario del belga continuará. "Respecto a Romandía, la clasificación general es un objetivo. Habrá una etapa dura con final en alto, pero en el resto las diferencias se marcarán en el prólogo y la contrarreloj. Eso es un fastidio, porque perderé algo de tiempo ahí. He trabajado en la contrarreloj, pero con mi situación actual no es fácil. Y eso no da mucha moral".