Lars van der Haar acabó segundo en el
Superprestige Niel tras una batalla épica frente al neerlandés
Laurens Sweeck.
"Fue una bonita batalla", dijo Van der Haar a WielerFlits. "Laurens siempre es un rival peligroso en la última vuelta. Me la jugué como creo que tenía que jugármela, pero al final se metió tres cuartos de más en la arena. He dejado un hueco a propósito. Si montas muy recto en la arena , no avanzas. Es un riesgo, pero era la única posibilidad de pasar por el arenero correctamente. De todos modos, me meto un diente de más, ya empiezo a morder con la rueda delantera. Era de esperar que tuviera que bajarse de la bici, pero lo hizo demasiado tarde", explicó van der Haar.
Su hombro se dislocó antes del inicio de la carrera y de nuevo durante la misma. Sin embargo, van der Haar pudo recuperarlo durante la carrera. "Eso es posible porque no sale al cien por cien, en realidad es la mitad. A veces lo sufro, sobre todo cuando estoy cansado. Y las dos últimas semanas han sido muy duras. A dos vueltas del final, volvió a ocurrir. Pero con unos cuantos movimientos de aleteo, por suerte lo he vuelto a meter", dijo van der Haar.
Aunque el neerlandés no pudo subirse a lo más alto del podio, disfrutó de la prueba. "Ha sido una bonita batalla. Lo he disfrutado. Ha sido una carrera muy bonita, un público muy agradable. Lástima que no haya ganado, por supuesto, uno quiere hacerlo, pero la batalla ha sido muy bonita", concluyó van der Haar.