Una de las historias del
Tour de Francia 2025 será, sin duda alguna, la de
Jonas Abrahamsen. El ciclista noruego de Uno-X consiguió hacerse con la victoria en la etapa 11 de la carrera de este pasado miércoles. Fue la mejor forma de dejar atrás los fantasmas de la lesión que casi le dejó sin disputar la carrera.
Uno-X Mobility fue el primer equipo en anunciar su alineación para la Grande Boucle. El equipo lo hizo casi con un mes de antelación. Abrahamsen, que estaba en la lista final, se rompió la clavícula en el Baloise Belgium Tour, y fue sacado del '8' para el Tour.
Sin embargo, el corredor no se rindió en ningún momento, y consiguió volver a entrar tras una recuperación milagrosa. Por esa razón, sus declaraciones respecto al triunfo conseguido fueron tan emotivas.
"Me rompí la clavícula hace cuatro semanas, y lloré en el hospital porque pensé que no llegaría al Tour de Francia. Al día siguiente, sin embargo, estaba en los rodillos y recuperé las esperanzas. A partir de entonces, hice todo lo que pude cada día para volver, y ganar una etapa aquí es increíble", comenzó señalando Abrahamsen tras su victoria.
"La gente me ha preguntado por qué no estaba más a menudo en la escapada, para sumar puntos para la clasificación de la montaña. Pero el objetivo del equipo era ganar una etapa, así que tuve que administrar mi energía con más prudencia", añadió el ciclista, que el año pasado en el Tour de Francia estuvo en las fugas casi todos los días de la primera semana y media.
"El año pasado estuve 14 días pedaleando por ello y estaba cansado, así que no pude ganar una etapa. Ese era mi sueño ahora. Sabía que tenía un buen esprint, pero ya llevábamos todo el día fuera, así que tenía que ser inteligente. Nuestra ventaja nunca fue muy grande; tuvimos que trabajar por ella todo el día. Esperaba ganarle en el sprint, y teníamos a un fuerte Mathieu van der Poel detrás", concluyó.