Emily Bridges, que salió del armario como mujer transgénero en octubre de 2020, ha estado en el centro del debate después de que British Cycling suspendiera su política anterior en medio de la polémica desatada cuando intentó correr como mujer en los campeonatos nacionales de omnium del año pasado.
"British Cycling es una organización fracasada, la escena de las carreras se está muriendo bajo vuestra mirada", escribió. "Ni siquiera sé si quiero seguir compitiendo con mi bicicleta, el peligro y todo lo que conllevaría correr hace que sea algo bastante difícil de justificar ante mí misma".
"Pero no tienes derecho a decirme cuándo he terminado. Es mi decisión y sólo mía. Sí, puede que esté hablando fuerte en este momento, pero esta es mi realidad ahora mismo. Es literalmente una lucha por la supervivencia para mí y mi familia en este momento", concluyó.
La nueva política crea una nueva categoría "abierta" en la que podrán competir las mujeres transgénero, los hombres transgénero, las personas no binarias y aquellas cuyo sexo haya sido asignado masculino al nacer, mientras que la categoría "femenina" se reserva a las personas cuyo sexo haya sido asignado femenino al nacer y a los hombres transgénero que aún no hayan iniciado la terapia hormonal.