Jonas Abrahamsen, al igual que la mayoría de sus compañeros de equipo del
Uno-X Pro Cycling Team, se alineará para su debut en una Gran Vuelta en el Grand Départ de Bilbao el 1 de julio. El noruego de 27 años describe que su trayectoria no fue nada fácil, ya que el corredor se jugó mucho con su peso para alcanzar su nivel actual.
"Cuando eres joven y sueñas con estar en lo más alto del
Tour de Francia, no puedes pesar demasiado. Yo estaba muy delgado cuando empecé en el ciclismo, quizá en torno a los 60 kilos, y creo que mi cuerpo no podía desarrollar músculo muy rápido", dijo Abrahamsen a Velo. "Puede que tenga algunas fibras musculares rápidas, pero cuando estaba demasiado delgado no podía utilizarlas. Era como bastante bueno como junior, pero después, sentí que era un poco demasiado ligero y no tenía nada sobre lo que construir".
"Fue difícil porque al principio sólo tenía contratos de un año. Si subes 10 ó 15 kilos en un año, no tendrás la misma potencia ni los mismos vatios por kilo en el mismo año. Tendrás un año duro y luego cada vez mejor", explica. "Cuando conseguí por primera vez un contrato de dos años, apostaba por ganar algo de peso. Recibí mucha ayuda de mi equipo y subí de 60 a unos 80 kilos, así que fue una gran diferencia. Antes era feliz cuando superaba los 900 vatios pico, ahora tengo como 1.500".
"Cada año, mi cuerpo responde mejor a mi peso, y cada vez tengo más potencia. Cuando estás delgado tienes que ser muy bueno para estar arriba, pero cuando rondas los 80 kilos y tienes más punta, puedes hacer muchas cosas como ayudar a otros corredores a colocarse, o puedes ir a por un sprint en un grupo pequeño, y puedes ir a por una escapada, tienes muchas más oportunidades. Creo que eso está muy bien".