Jay Vine tiene una de las historias más particulares del pelotón y es la cara de un sistema de ojeadores en constante evolución que se está implantando en la cima del ciclismo. Nos cuenta cómo fueron sus primeros años como ciclista y su fichaje por el UAE Team Emirates.
"Me parece absurdo que siga existiendo eso de que hay que competir correctamente: los vatios son los vatios", declaró Vine a Cyclingnews. "Sin COVID, quizá no hubiera tenido la oportunidad", asegura, tras convertirse en profesional en 2020.
Vine explicó cómo decidió darlo todo por el sueño de convertirse en ciclista profesional. En 2020 fichó por el Nero Continental australiano y estuvo corriendo por el circuito australiano. Tras varios años de esfuerzo suyo y de su compañero Bre, el evento Zwift Academy fue el gran avance que necesitaba.
"En realidad no tenía un plan, era más bien que si en un momento dado no había empezado a ganar un cheque, iba a tener que tirar la toalla", dice Vine. "Creo que a finales de 2021 como muy tarde, y eso sólo si 2020 había ido muy bien pero no había tenido el impacto que buscábamos".
"Dije: 'Ese es mi contrato: soy uno de los mejores escaladores de Australia, y probablemente soy el mejor escalador de Australia que aún no ha sido contratado por un equipo WorldTour. Me preparé a fondo, no había nada más que hacer". Finalmente, Vine ganó la prueba, demostrando su capacidad como ciclista, y se ganó un contrato con Alpecin-Deceuninck.
En 2021 estaba en el pelotón profesional, corriendo junto a corredores de la talla de Mathieu van der Poel, Jasper Philipsen y Tim Merlier. Fue un gran paso que tardó en dar sus frutos, pero el Belgian Pro Team se beneficiaría del movimiento en 2022.
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Vine impresionó durante toda la temporada, pero fue en la Vuelta a España donde tuvo otro gran avance. Con casi dos años de carreras en Europa a sus espaldas, había desarrollado las habilidades necesarias para rodar en el pelotón, y las puso en práctica en España.
Abandonó la carrera en la última semana, pero eso no le impidió sumar dos victorias de etapa y vestir el maillot de la montaña hasta sus últimos momentos en la carrera. "Estaba enfadado porque quería ganar otra etapa", admitió. "Pero lo positivo de perder el maillot es que aprenderé a vivir con ello".
Vine se impuso directamente a corredores de la talla de Remco Evenepoel, Primoz Roglic y Enric Mas en la cima inicial de San Miguel de Aguayo. Su capacidad escaladora era más que evidente, y eso hizo que el UAE Team Emirates presionara aún más para fichar al australiano. Tras un traspaso en el que ha firmado un acuerdo de confidencialidad, Vine corre ahora junto a corredores del nivel de Tadej Pogacar.
Vine ya ha debutado ganando con los colores del equipo, al hacerse con el campeonato nacional australiano de contrarreloj. Pronto participará en el Giro de Italia junto a João Almeida, pero es posible que no tenga un papel de gregario. "Está claro que el equipo no me ha fichado sólo para hacer de gregario", insinúa Vine. "Va a ser emocionante".
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