Jasper Philipsen sabía que la llegada de la etapa inaugural del
Renewi Tour en Ardooie era muy técnica pero, por suerte, contó con el gran apoyo de sus compañeros de equipo que le guiaron a través de los tramposos circuitos locales, como explica el belga en la entrevista posterior a la etapa.
En el último kilómetro, Philipsen eligió la rueda de Arnaud De Lie. Resultó ser la elección correcta: "Fue una batalla divertida. Arnaud tenía delante a Jasper De Buyst, y yo a Jonas Rickaert, que hizo un trabajo excelente. Antes de eso también tenía a algunos ciclistas experimentados. Entonces es bonito que pueda rematar así".
El líder del
Alpecin-Deceuninck aún tuvo que evitar al esquivo De Buyst, pero luego esprintó hacia la victoria con potencia. "He tenido que tomar decisiones rápidas, hoy ha ido bien. Ha sido un sprint bastante técnico y la llegada también ha cambiado un poco aquí. El posicionamiento es muy importante en este sentido", afirma.
Philipsen no piensa en la victoria final en el Renewi Tour. "No me subo a una bicicleta de contrarreloj desde el Tour de Francia, así que será muy difícil", ríe.