Ethan Vernon demostró ser el más fuerte de los hombres rápidos tras una caótica primera etapa del Tour de Romandía, y continuó así con la reciente buena racha del Soudal Quick-Step, para alegría del equipo.
"Esto es muy bonito, porque es mi segunda victoria WorldTour después de la de la Volta a Catalunya del año pasado", dice en su entrevista posterior a la etapa. "Por eso es bonito volver a ganar en el WorldTour. Sabíamos que iba a ser difícil. Por suerte tenía piernas para seguir y sobrevivir a las subidas. Me aproveché de eso".
La victoria del corredor de 22 años llega un día después de que su compañero de equipo Josef Cerny se hiciera con el triunfo en el prólogo y, por supuesto, de que el pasado fin de semana Remco Evenepoel lograra un dominante triunfo en la Lieja-Bastoña-Lieja. Con el Giro de Italia a la vuelta de la esquina, las cosas pintan bien para el Soudal Quick-Step.
"Es muy especial. Como equipo estamos ganando mucho. Sin duda es bueno para mí, porque esta primavera ya había ganado tres veces, pero luego me puse enfermo. Es estupendo que gane ahora que vuelvo a estar en forma", prosigue Vernon. "La etapa de mañana vuelve a ser difícil, pero hoy tenía buenas piernas. Si no sale bien, tenemos más corredores en el equipo que pueden aprovechar su oportunidad."