Caleb Ewan es un corredor que en su mejor momento ha ganado en Hatta Dam, ha escalado junto a los mejores en el Poggio di Sanremo y ha demostrado sus dotes de escalador a lo largo de todo el calendario. En buena forma, el líder del Lotto Dstny espera rendir hoy en el
Tour de Francia en un final accidentado.
"Me quedé encajonado cerca de la meta. Después de eso se acabó mi sprint. Eso forma parte de la carrera, ¿no? A veces tienes suerte y a veces no", dijo Caleb Ewan tras el final del séptimo día de carrera en la Grand Boucle. "Ahora hay que continuar. Estoy completamente concentrado en la etapa del sábado".
Ewan es un corredor que suele tener problemas de posicionamiento, pero ha superado bastante bien los dos primeros sprints y ha estado a punto de ganar la cuarta etapa, en Nogaro, lo que supondría su primera victoria en una Gran Vuelta desde el Giro de Italia de 2021. Tener buenas piernas no fue suficiente ayer, ya que se quedó fuera del sprint, llegando en 45ª posición al final del día.
Hoy en Limoges el pelotón se encuentra con un final accidentado que se adaptará a diferentes tipos de corredores, quizás el australiano sea uno de ellos. La etapa no presenta ninguna colina demasiado difícil, sino un terreno ondulado y una lucha feroz por el posicionamiento seguro para la última hora de carrera. Si el Pocket Rocket sobrevive a ese terreno, tendrá entonces que disputar el sprint en un arrastre final hasta la línea que tiene una media del 4% durante 700 metros, un final que podría sentarle muy bien al australiano.