El ciclismo tiene un problema con sus emisiones. Aunque la actividad ciclista en sí no es un gran problema, la caravana de la carrera y la logística que rodea a todos los equipos provocan grandes problemas. Esta semana, líderes mundiales y muchos más se reunieron en Dubai para debatir formas de reducir la huella de carbono en el mundo, y el
UAE Team Emirates se ha marcado el objetivo de ser neutral hasta 20230.
En 2022 el equipo calculó haber tenido una huella de carbono de 224,98 toneladas de CO2. Aunque es muy difícil eliminar directamente esas emisiones, pueden financiar o trabajar en otros proyectos que beneficien indirectamente al medio ambiente. Es el caso del equipo, que en cinco naciones diferentes ha desarrollado proyectos de preservación de bosques, energías renovables y carbono azul, según Cyclingnews. Casos concretos como, por ejemplo, el regreso en helicóptero del Soudal Quick-Step al hotel durante el Giro de Italia suscitaron gran preocupación y debate sobre la regulación de las emisiones en el deporte.
"Desde el primer día, la misión de nuestro equipo ha sido algo más que ganar carreras ciclistas; fuimos creados para convertirnos en un vehículo para el cambio", declaró en la conferencia el director del equipo,
Mauro Gianetti. El equipo tuvo representantes en el evento teniendo en cuenta la financiación del mismo por parte del país, y allí, además de la garantía de apoyo a largo plazo, también se hicieron promesas.
"Junto con el apoyo de nuestros socios, nos hemos comprometido a impulsar un impacto social positivo. Ya lo hemos materializado a través de una serie de iniciativas de salud y bienestar que fomentan, posibilitan y defienden el uso de la bicicleta, y ahora ampliaremos nuestro cometido apoyando las ambiciones de descarbonización y aplicando un programa integral de sostenibilidad destinado a lograr una huella de carbono neta cero para finales de 2030".