Tradicionalmente, la
Clásica de Hamburgo es una buena oportunidad para que los velocistas añadan una prestigiosa carrera de un día a su palmarés, pero la presencia del corto pero empinado Waseberg -la última vez a falta de 15 kilómetros- dará a los atacantes la plataforma de lanzamiento perfecta para intentar descolgar a los hombres rápidos antes de la llegada en Mönckebergstraße, en pleno centro de Hamburgo.
El
Soudal Quick-Step ya consiguió ganar la carrera cuatro veces en el pasado (2003, 2005, 2018 y 2019). La mejor baza del equipo belga será el veloz
Tim Merlier, que liderará una alineación mixta de clasicómanos y especialistas en sprints de pelotón. Probablemente dependerá de
Yves Lampaert y
Florian Sénéchal controlar el caótico final para su velocista.
"Conocemos bastante bien esta carrera, la hemos ganado varias veces con diferentes corredores, y estamos deseando que llegue el domingo. Hay muchas posibilidades, desde un pequeño grupo que llegue a la meta hasta un sprint masivo para determinar el ganador, así que veremos cómo se desarrollan las cosas. Llegamos a la salida con dos hombres rápidos en el pelotón, y esto nos da la posibilidad de jugar con la táctica, así que esperemos estar ahí para luchar por la victoria", dijo el director deportivo Wilfried Peeters.
Equipo del Soudal Quick-Step para la Clásica de Hamburgo:Tim Declercq, Yves Lampaert, Tim Merlier, Florian Sénéchal,
Bert Van Lerberghe,
Stan Van Tricht y
Ethan Vernon.