Tras 8 etapas,
Mathieu van der Poel ya ha dejado atrás el objetivo del maillot amarillo. El neerlandés empezó el
Tour de Francia 2025 por todo lo alto, con una victoria de etapa y 4 días como líder de la carrera.
Para el de
Alpecin-Deceuninck, el objetivo en la Grande Boucle está prácticamente cumplido. El neerlandés ya solo se puede centrar en cazar alguna etapa más en la fuga, y sobre todo en ayudar a
Kaden Groves en los esprints que queden por delante.
Precisamente, sobre ello habló Van der Poel tras la etapa 8, donde Groves peleó por la victoria (fue 3º) gracias a la asistencia que, en condiciones normales, el neerlandés le habría dado a Jasper Philipsen (que abandonó la carrera de forma prematura).
"Sabes que habrá equipos que vendrán por detrás en el descenso, especialmente tras el tramo cuesta arriba hacia la rotonda, donde giramos. Así que sí, intenté cronometrar lo mejor que pude. Al final, tuve que esperar un poco porque creo que Kaden perdió la rueda. Creo que lo hicimos bien. Kaden también. Terminar tercero es bastante fuerte", empezó señalando Van der Poel.
"Sabemos que Jonathan Milan es el más rápido aquí, junto con Tim Merlier. Con Jasper podríamos haber tenido más posibilidades hoy aquí, pero Kaden viene del Giro. Está mejorando cada día. Quizá consigamos con él una victoria más adelante", concluyó como objetivo prioritario hasta que termine el Tour de Francia.