¡El equipo de Kasia Niewiadoma ficha a una boxeadora invicta con casi 600 mil seguidores en Instagram!

Hace menos de un año, la joven promesa alemana Sophie Alisch celebraba su décima victoria consecutiva en el boxeo profesional. A sus 23 años, su carrera sobre el ring parecía imparable. Pero en marzo de este año, sorprendió a todos con un anuncio tan inesperado como ambicioso: dejaba el boxeo para perseguir un sueño completamente distinto: competir en ciclismo en los Juegos Olímpicos de 2028.

Ese sueño acaba de dar un paso clave. Alisch ha firmado contrato con el equipo de desarrollo CANYON//SRAM Generation, una escuadra formativa del reconocido equipo WorldTour femenino Canyon//SRAM Racing, uno de los cinco mejores del mundo al cierre de 2025.

“Honestamente, se siente surrealista. Unirme a un equipo con una identidad tan fuerte, tanta profundidad y propósito es un gran honor”, expresó Alisch en un comunicado. “Vengo de otro deporte, de otro mundo en muchos sentidos, pero desde la primera conversación sentí que este equipo entendía qué es lo que me impulsa. Es el lugar perfecto para crecer, aprender y volver a demostrarme de lo que soy capaz”.

La transición de Alisch no parece haber sido tan repentina como su anuncio. Desde hace meses, imágenes compartidas en su cuenta de Instagram (donde suma cerca de 600.000 seguidores) la mostraban entrenando en bicicleta con una Canyon, incluso antes de oficializar su salida del boxeo.

Y es que el ciclismo empezó como una pasión silenciosa mientras aún entrenaba y competía en el cuadrilátero. “Comenzó como un escape, algo tranquilo mientras me enfocaba plenamente en el boxeo. Pero con el tiempo se transformó en algo que ya no podía ignorar”, confiesa. “Quería desafiarme de una nueva forma, poner a prueba mi cuerpo, mi mente y mis límites fuera del ring”.

Durante su carrera boxística, Alisch compitió en la categoría de 57 kilogramos, aunque probablemente su peso real era superior, lo que implica que su físico, adaptado al boxeo, deberá transformarse para rendir sobre la bicicleta, donde la resistencia y la eficiencia pesan más que la potencia muscular.

De hecho, su nuevo camino en el ciclismo profesional no será sencillo. A diferencia de otras ciclistas de su edad, Alisch no ha competido aún en ninguna carrera del calendario UCI, algo que seguramente cambiará ahora que forma parte del equipo de desarrollo de Canyon//SRAM. Allí se espera que compita en carreras de categoría 1 y 2, ganando experiencia ante rivales con años de formación específica.

El fichaje de Alisch se da en un contexto en el que el equipo Canyon//SRAM ha cerrado la temporada en la quinta posición del ranking mundial, y cuenta entre sus filas con figuras como Kasia Niewiadoma, Chiara Consonni y Cecilie Uttrup Ludwig. Sin duda, un entorno de élite que podría acelerar el proceso de adaptación de la joven alemana.

Aún queda un largo recorrido hacia los Juegos Olímpicos, pero la determinación que mostró en el ring parece haberse trasladado al asfalto. Sophie Alisch no solo quiere cambiar de deporte: quiere llegar a la cima de uno nuevo. “Es tiempo de probarme otra vez… en otro campo de batalla”, concluye la deportista, ahora sin guantes, pero con un casco y la vista puesta en 2028.