Podría decirse que
Eddy Merckx, la mayor leyenda de la historia del ciclismo, ha dejado un impacto indeleble en la historia de este deporte. Un ejemplo de la repercusión del belga que muchos quizá no conozcan es la carrera de
Eddie Dunbar, del
Jayco-AlUla.
En 2015, en la Copa de las Naciones sub-23 de La Côte Picarde, Dunbar era un joven de 18 años que corría para el NFTO. El irlandés atacó pronto, abriendo una gran ventaja sobre el pelotón y asegurándose la clasificación de la montaña, la clasificación por puntos y el título de corredor más agresivo.
Aunque no pudo mantener la victoria, llegando a casa en 42ª posición tras el triunfo de Simone Consonni, Merckx, que estaba presente y pasó un rato en el coche del director de carrera, quedó increíblemente impresionado por la actuación de Dunbar y sus palabras posteriores a la carrera dejaron una impresión duradera en el joven irlandés.
"Estuvo detrás de mí durante tres horas en el coche", dijo Dunbar a VeloNews en su serie Historias de Origen. "Ni siquiera le dio la mano al ganador, pero se me acercó después y me dijo 'bien hecho'. Dijo que era muy impresionante. Creo que le gustó, es lo que solía hacer como ciclista. Quizá disfrutó viéndolo de nuevo".