"Conociendo a Tadej, querrá competir en...": Un compañero de Pogacar, sobre su ¿nuevo objetivo?

A Tadej Pogacar se le van terminando las carreras que aún no ha ganado. El esloveno ha seguido tachando objetivos esta temporada 2025, como el Campeonato de Europa o el Dauphiné. La estrella de UAE está obsesionada por completar su palmarés, y por eso le tiene tantas ganas a París-Roubaix o Milán-San Remo. Pero hay una que empieza a interesarle, y no es otra que el Mundial de Gravel.

Florian Vermeersch se ha convertido en el nuevo maillot arcoíris tras ganar el mencionado Mundial a principios de este mes (el año pasado fue 2º por detrás de Mathieu van der Poel). El del UAE Team Emirates XRG fue un estrecho apoyo de Pogacar en la París-Roubaix, donde también debería desempeñar un papel crucial en 2026.

Sin embargo, cree que su líder participará en el Mundial de Gravel muy pronto.

Hablando con Sporza, Vermeersch ofreció más detalles sobre la posibilidad de ver a Pogacar pelear por un nuevo maillot arcoíris, además de su triunfo en Limburgo del Sur, donde un ataque a distancia junto con Friets Besterbos les permitió eludir a la competencia en el final. Después de la llegada, habló con Pogacar y le dijo que le veía participando también en algún momento.

"Me envió un mensaje con felicitaciones. Se lo agradezco. Conociendo a Pogacar, probablemente querrá competir en el Mundial de Gravel en el futuro", comenzó señalando el campeón del mundo de sterrato.

Esto podría haber ocurrido ya este año, ya que el evento iba a celebrarse inicialmente en Niza, cerca de casa para el esloveno y al día siguiente de terminar su temporada en Il Lombardia. Sin embargo el cambio a Holanda puso un obstáculo en el camino. Tom Pidcock compaginó las dos carreras, pero finalmente no obtuvo el resultado deseado en ninguna de ellas.

Sobre la victoria de Florian Vermeersch, fue una que parecía improbable al principio de la carrera, donde pinchó. Cuando ocurre eso en el Mundial, simplemente no tienes un coche de equipo para cambiar rápidamente de bici.

"Por suerte, llevaba conmigo un cartucho de CO2 y tapones para tapar el agujero de mi neumático. Eso me retrasó un minuto y medio, pero después de 20 ó 30 kilómetros, pude alcanzar al resto", sentenció.

Lo que siguió fue una actuación memorable, en la que a pesar de haber sufrido mala suerte al principio, parecía ser el hombre con las piernas más fuertes del día, no sólo sincronizando su movimiento a la perfección, sino también manteniendo su impulso hasta la línea de meta. ¿Le sucederá Pogacar como maillot arcoíris en 2026?