El viernes, en Quebec, el mundo del ciclismo fue testigo de una rareza: A
Tadej Pogacar se le negó la victoria. Sin embargo, a medida que se acercaba el domingo y se desarrollaba el GP de Montreal, la estrella eslovena del ciclismo demostró una vez más por qué se le considera el corredor número uno de su generación. De cara a los Campeonatos del Mundo de 2024 en Zúrich, con la victoria de Montreal en su haber, Pogacar está en una forma formidable, listo para conquistar de nuevo.
Artículo escrito por Fin Mayor en
Cyclinguptodate.
Tras tomarse casi dos meses de descanso después del Tour de Francia en julio, el regreso de Pogacar a la competición es una clara advertencia para sus competidores. A pesar del periodo de descanso, se mantiene en el tipo de forma que le permitió desmantelar a sus rivales tanto en el Giro de Italia como en el Tour de Francia a principios de 2024. Su extraordinario doblete Giro-Tour fue una hazaña que ningún ciclista había logrado desde
Marco Pantani en 1998. El dominio de Pogacar esta temporada le permite hacer historia y, si se enfunda el maillot arco iris a finales de este mes, consolidaría lo que podría ser la mejor temporada jamás lograda por un ciclista.
Con tan altas posibilidades, cabe preguntarse: ¿quién más en la historia del ciclismo ha tenido una temporada que rivalice con la fenomenal 2024 de Pogacar?.
Un nombre viene inevitablemente a la mente cuando se habla de temporadas dominantes en el ciclismo: Eddy Merckx. Conocido como "El Caníbal" por su implacable búsqueda de la victoria, Merckx tuvo varias temporadas impresionantes, pero su campaña de 1972 destaca como una de las mejores. Ese año, Merckx ganó el Giro de Italia y el Tour de Francia, algo parecido a lo que ha hecho Pogacar esta temporada. El ciclista belga no sólo ganó dos Grandes Vueltas, sino que también se proclamó campeón del mundo en Gap (Francia), completando así un legendario triplete.
En 1972, Merckx ganó cinco Monumentos (París-Roubaix, Milán-San Remo, Lieja-Bastogne-Lieja, el Giro de Lombardía y la Flecha Valona) y dominó muchas otras pruebas. Su dominio absoluto de este deporte en diversas carreras hace de su temporada de 1972 una de las mejores de la historia del ciclismo. Si Pogacar consigue el maillot arco iris en Zúrich, será difícil pasar por alto los paralelismos con el mítico 1972 de Merckx.
Bernard Hinault - 1982
Otro icono del ciclismo cuyo nombre no puede faltar en la conversación es Bernard Hinault, un hombre cuyo apodo, "El Tejón", reflejaba su estilo de conducción agresivo y tenaz. Hinault tuvo una carrera ilustre, pero la temporada de 1982 es uno de sus momentos culminantes. Al igual que Pogacar en 2024, Hinault completó un doblete Giro-Tour, afirmando su dominio sobre el pelotón y demostrando su versatilidad como ciclista.
Lo que hizo realmente notable la temporada de Hinault fue su capacidad para dominar durante toda la temporada, no sólo en las Grandes Vueltas. Además de sus victorias en el Giro y el Tour, Hinault se impuso en carreras prestigiosas como La Flecha Valona y se le negó por poco la victoria en París-Roubaix. Aunque no ganó el Campeonato del Mundo ese año, la temporada 1982 de Hinault fue de un dominio y una fuerza totales, que recordaban a la brillantez de Pogacar.
Fausto Coppi, sinónimo de leyenda ciclista, protagonizó una temporada inolvidable en 1949. Durante este periodo, Coppi ganó tanto el Giro de Italia como el Tour de Francia, al igual que Pogacar en 2024. El ciclista italiano fue especialmente dominante en su carrera de casa, el Giro, donde se llevó la clasificación general, el maillot de Rey de la Montaña y varias etapas.
En el Tour de Francia, la actuación de Coppi no fue menos impresionante. Se alejó de sus competidores en la montaña y terminó con casi 11 minutos de ventaja sobre su rival más cercano. No contento con dominar las Grandes Vueltas, Coppi también se llevó la victoria en el Giro de Lombardía, uno de los Monumentos del ciclismo, consolidando su lugar como el corredor más destacado de su época.
La temporada 1949 de Coppi es recordada como un sello de excelencia y un punto de inflexión en el deporte. Al igual que Pogacar, Coppi fue venerado por su capacidad para ganar en todos los terrenos y por su increíble regularidad a lo largo de la temporada.
En términos de comparaciones históricas, la temporada 1987 de Stephen Roche es una de las pocas que pueden igualar la magnitud de los logros de Pogacar en 2024. La temporada de Roche es legendaria por la rara "triple corona" que logró ese año: ganar el Giro de Italia, el Tour de Francia y el Campeonato del Mundo.
Las victorias de Roche no estuvieron exentas de dramatismo. En el Giro, ganó por sólo 3 segundos, uno de los márgenes más estrechos de la historia de la carrera. En el Tour de Francia, cimentó su lugar en la historia del ciclismo con una asombrosa actuación en La Plagne, una llegada a gran altitud en la que recuperó tiempo de forma espectacular a los líderes. Por si fuera poco, Roche se proclamó Campeón del Mundo en Austria, lo que le convirtió en el segundo corredor (después de Merckx) en ganar el Giro, el Tour y el Campeonato del Mundo en la misma temporada.
Esta increíble hazaña es uno de los logros más prestigiosos del ciclismo, y si Pogacar ganara el maillot arco iris a finales de este mes, su temporada invitaría sin duda a comparaciones con la fenomenal 1987 de Roche.
Marco Pantani - 1998
Aunque la carrera de Pantani se vio empañada por la polémica, su temporada de 1998 sigue siendo una de las demostraciones más notables de destreza escaladora que jamás haya visto el deporte. Pantani, al igual que Pogacar, logró el doblete Giro-Tour, ganando ambas carreras en una temporada en la que arrasó a sus rivales en las subidas más empinadas.
La capacidad de Pantani para dominar en la montaña y asestar golpes de gracia en las etapas más difíciles del Giro y del Tour cautivó a los aficionados al ciclismo. Su agresivo estilo de carrera, atacando en cada oportunidad, le convirtió en uno de los favoritos de los aficionados y contribuyó a la leyenda de su campaña de 1998. Al igual que Pogacar, la temporada de Pantani se caracterizó por su voluntad de atacar y asumir riesgos, a menudo liderando desde el frente y forzando el ritmo en cada oportunidad.
Conclusión: ¿Podrá Pogacar sellar su lugar en la historia?
Mientras Pogacar se dirige a los Campeonatos del Mundo, no se puede negar el carácter histórico de su temporada 2024. Desde su inigualable doblete en el Giro-Tour hasta sus recientes triunfos en Canadá, se ha consolidado como el corredor más dominante de la era moderna. Si consigue el maillot arco iris en Zúrich, habrá grabado su nombre entre las mejores temporadas de la historia del ciclismo, comparable a leyendas como Merckx, Hinault, Coppi y Roche.