"Mathieu es, ante todo, un compañero realmente excelente": Tibor del Grosso rechaza la comparación con Van der Poel

No es casualidad que a Tibor del Grosso le llamen el “nuevo van der Poel”. Aunque igualar el palmarès es difícil, el neerlandés procede del mismo país, corre en el mismo equipo, progresa hacia la ruta por el mismo camino y exhibe una habilidad técnica similar a la de su compañero. Ambos compiten juntos esta temporada de ciclocross y en Gavere coincidieron por primera vez en el podio.

“Fue una edición diferente [y fría] de Gavere. Estaba muy resbaladizo; monté cubiertas de barro”, explicó del Grosso en la entrevista posterior. Notó de nuevo la espalda, aunque esta vez no pareció limitarle. “No fue ideal; requiere mucha gestión. Está funcionando bastante bien. También es distinto al año pasado en sub-23, cuando yo era el mejor y podía marcar más mis propios límites.”

La carrera fue dura, marcada por los numerosos ataques de Thibau Nys para intentar poner en apuros a Mathieu van der Poel. No salió, y un error costoso en las vueltas finales abrió una brecha que ya no se cerró. La batalla por el tercer puesto estuvo abierta con varios candidatos, pero finalmente del Grosso se impuso a Toon Aerts y Emiel Verstrynge, que esprintaron por detrás.

“En una carrera contra Mathieu y Thibau me exprimen más al límite, así que es más exigente. Hoy no tuve las piernas, pero aunque las hubiera tenido, sé que sería suicida ir con esos dos. Hoy era por el tercer puesto”, asumió el corredor de 22 años. Tras batir a Wout van Aert en Heusden-Zolder, esto refuerza su forma y su condición de talento en la élite del ciclocross.

El neerlandés solo inició su campaña de ciclocross en Namur, hace dos fines de semana, y llegará más fresco que muchos rivales. Busca su mejor forma para los nacionales —donde defiende título— y para el Mundial —correrá en la categoría élite, aunque es el vigente campeón sub-23—.

“Mi pico será en enero, con el Nacional y el Mundial. Espero estar allí al máximo… El año pasado tampoco corrí mal, pero este estoy más centrado en ganar trofeos. Koksijde ya salió muy bien, así que sabía que podía hacerlo, pero tengo que rematarlo cada vez con las piernas y la espalda”.

“¿Podemos hablar de tácticas de equipo? No, no realmente. En el ciclocross cada uno va a lo suyo, especialmente en una carrera tan justa”, añade. Sin embargo, competir bajo el foco que ilumina a Mathieu van der Poel ayuda a desviar presión. Y, subraya, ambos son buenos amigos. “Mathieu es, ante todo, un compañero realmente excelente, y que quede claro que la comparación no va más allá de que corremos en el mismo equipo y tenemos la misma nacionalidad, jaja. Solo hay un Mathieu”.