"Todo el mundo sabe que si atacas pronto es que estás en forma": Mattias Skjelmose pudo con Hirschi en Luxemburgo

La temporada de Mattias Skjelmose ha estado marcada por altibajos, momentos complicados y resultados dispares, pero en las últimas semanas el ciclista danés parece haber encontrado nuevamente la inspiración.

Justo antes del Mundial y del Campeonato de Europa está mostrando señales de recuperación. Ahora, en la Vuelta a Luxemburgo, ha confirmado ese buen estado de forma al conquistar su primera victoria desde el mes de junio, colocándose al mismo tiempo al frente de la clasificación general.

El tercer día de competición en Luxemburgo estaba señalado como uno de los más determinantes para la lucha por la general. La dureza del recorrido se encargó de separar a los escaladores y a los puncheurs del resto de participantes, reduciendo de manera significativa la nómina de candidatos que llegarán con opciones a la contrarreloj decisiva de mañana.

La jornada fue especialmente exigente, con numerosos ataques lanzados desde distintos equipos y un ritmo altísimo en las ascensiones más duras. La selección definitiva se produjo en una subida empinada, donde únicamente una docena de corredores pudieron mantenerse en condiciones de disputar la victoria de etapa.

Entre ellos estuvo Marc Hirschi, que trató de sorprender con un ataque anticipado. El propio Skjelmose explicó después por qué entendía esa táctica del suizo: “Ha sido difícil para todos, todo el mundo sabe que si atacas pronto tienes la moto y Marc ha estado muy bien, ha estado muy fuerte, ha sido difícil alcanzarle”.

Sin embargo, la apuesta de Hirschi no encontró recompensa. En la subida adoquinada final hacia la línea de meta, el ritmo del grupo perseguidor fue demasiado alto y acabó neutralizando al corredor del UAE Team Emirates.

La resolución se produjo en los metros finales, con un sprint explosivo y desordenado. Allí, Brandon McNulty lanzó su movimiento antes de tiempo, circunstancia que aprovechó Skjelmose para superarle justo en el último instante. Con una aceleración poderosa, el corredor del Lidl-Trek logró imponerse y resistir el empuje de Jordan Jegat, que cruzó la meta en segunda posición.

La victoria tuvo un premio doble: además de alzarse con el triunfo de etapa, el danés se vistió con el maillot de líder, ya que Romain Grégoire no logró estar en la pelea final.

Skjelmose no dudó en reconocer la importancia del trabajo de su compañero de equipo Toms Skujins, que resultó decisivo en la persecución de los kilómetros finales: “Lo hizo súper bien al final, lo hablamos, le dije que no me sentía súper y le pregunté si podía ganar y me dijo ‘no no vamos todos a por ti’ y sí, cumplió a la perfección y yo sólo tuve que ejecutarlo al final”.

El esfuerzo del letón fue fundamental para que el líder del Lidl-Trek llegara con opciones y rematara la faena en la llegada.

Tras la etapa, Skjelmose aventaja a Jordan Jegat en 4 segundos, aunque la gran amenaza es Brandon McNulty, que se sitúa a tan solo 8 segundos en la general. Con la contrarreloj decisiva prevista para este sábado, todas las miradas estarán puestas en el estadounidense.

El propio Skjelmose reconoció que defender el liderato no será sencillo: “Va a ser difícil tener el maillot de líder. La contrarreloj es una gran desventaja, pero vamos a hacer lo que podamos y ojalá podamos ganar la carrera”.