Tras un año de parón,
Tadej Pogacar regresa a los
campeonatos nacionales. En vísperas del
Tour de Francia 2023, el esloveno quiere correr y ganar en las carreteras de su país tras haber abandonado sus planes de correr el Tour Eslovenia por la lesión que sufrió tras una caída en la Lieja-Bastoña-Lieja.
"El campeonato nacional será un buen entrenamiento para mí. El recorrido de la contrarreloj es muy bueno, es el mismo que en 2020", admitió el corredor del
UAE Team Emirates a Siol. "Es una buena preparación y un gran test para comprobar mis sensaciones antes del Tour. El domingo haré la carrera en ruta para meter velocidad en las piernas justo antes del Tour. Creo que el campeonato nacional será un muy buen indicador de lo que puedo esperar en el Tour en términos de cronómetro. Tendré una mejor idea de mi forma en la contrarreloj".
Después de tres semanas de entrenamiento que incluyeron mucho tiempo en altitud y unos días explorando algunas de las etapas que los corredores encontrarán en el Tour de Francia, Pogacar ha decidido que la mejor manera de terminar su preparación para el Tour sería con alguna carrera. Debido a la falta de tiempo para entrenar -por su lesión de muñeca- ha tenido que renunciar a los planes de estar presente en carreras por etapas, como hicieron todos sus rivales este mes de junio, pero ha encontrado una solución en Eslovenia.
Sin la presencia de Primoz Roglic, Pogacar debería ser el gran favorito para ganar ambas pruebas, especialmente la contrarreloj de esta tarde. Podría llegar al Tour de Francia con nuevos colores en la espalda después de este fin de semana en el que pondrá a prueba su estado de forma.