La carrera del velocista argentino
Max Richeze llegará a su fin después de la
Vuelta a San Juan, tras la decepción de haber sido abandonado por
Mark Cavendish cuando parecía probable un reencuentro.
"Deberíamos haber corrido juntos en B&B, pero el proyecto se fue a pique. Seguí hablando con Mark, me dijo que quería llevarme con él, también hablamos del tema del Astana y de un día para otro no me cogió el teléfono", revela Richeze en una entrevista a Tutto Bicci Web. "Es un gran campeón, pero desde el punto de vista humano me decepcionó. No era difícil decirme que no podía llevarme con él, bastaba con una llamada o un mensaje, lo habría entendido. Correr con él, pensar en afrontar juntos el Tour de Francia para intentar batir un récord histórico me dio una gran motivación".
A sus 39 años, Richeze es agente libre tras la finalización de su contrato con el UAE Team Emirates. Por ello, correrá su última carrera delante de sus seguidores argentinos en la Vuelta a San Juan.
"He vivido muchos momentos hermosos", dice. "Entre mis victorias, recuerdo dos. La de Suiza delante de Sagan con el maillot arco iris y luego cuando gané aquí en Argentina, delante de mi familia y de mi gente. Estoy muy satisfecho con mi carrera, he tenido mis oportunidades, siempre he tenido una excelente relación con mis líderes y sus victorias siempre las he sentido como mías también".