Mathieu van der Poel ha sido el número uno indiscutible del ciclocross este invierno. ¿Podrá poner la guinda con otra victoria con el maillot arco iris del
Campeonato Mundial de Ciclocross hoy en Tabor? Según el campeón del mundo de 1990, Henk Baars, cualquier otra cosa sería una pena.
"He vuelto a disfrutar de Van der Poel este invierno y me sigue sorprendiendo que Mathieu sólo parezca mejorar. Y que es un ganador que casi siempre puede tomar el control de la carrera, mientras que todavía tiene un fuerte oponente con alguien como Wout van Aert", dice Baars elogiosamente a De Telegraaf. "Es una pena que Wout no esté en este Campeonato del Mundo, en lo que a mí respecta, los más fuertes pertenecen a este escenario. Supongo que Mathieu ganará el domingo, aunque siempre te puede pasar algo en un día así. Pero nadie espera eso".
La opinión de que van der Poel ganará con toda seguridad salvo accidente es compartida por muchos, incluidos algunos de los propios pilotos. Sin embargo, Baars cree que si la carrera se decidiera así sería una gran injusticia. "Espero que Mathieu se proclame campeón del mundo. Sería casi una vergüenza ver a otra persona con ese maillot durante un año porque se beneficia de la mala suerte en Tabor. Nadie más merece ese título mundial".
"Mathieu es simplemente mejor y debemos disfrutar de tener un piloto tan excepcional. Cuando oigo a los belgas decir que esperan batir a Van der Poel, casi siempre me río. El domingo me sentaré delante del televisor y esperaré la 'señal' de que está a punto de salir", concluye Baars. "No es cuestión de si atacará, sino de cuándo, porque probablemente no querrá terminar ocho vueltas por delante de los demás. Pero si cambia de marcha, se va y gana su sexto título mundial. Es increíblemente inteligente".
