Yves Lampaert corrió una gran
Clásica de Hamburgo en la que estuvo muy cerca de conseguir la victoria. El belga del
Soudal Quick-Step rindió a muy buen nivel y sólo un descomnal Mads Pedersen evitó que ganara.
La carrera culminó con un impresionante recorrido que llevó a Lampaert a asegurar un merecido sexto lugar, después de una actuación que dejó una marca imborrable en la historia de esta edición. Los últimos kilómetros de la carrera resultaron en una auténtica montaña rusa de emociones, con un desenlace que mantendrá a los fanáticos del ciclismo hablando durante mucho tiempo.
Fue en los últimos 15 kilómetros de la Bemer Cyclassics donde Yves Lampaert se convirtió en el protagonista indiscutible. El pelotón se dividió por última vez mientras subían el desafiante Waseberg, una subida de 800 metros con una pendiente del 8,7%. En la cima de esta montaña, solo un selecto grupo de corredores logró mantenerse en cabeza, y entre ellos emergió la figura de Lampaert.
El corredor belga se unió a dos hombres que habían atacado previamente, formando un trío que rápidamente comenzó a forjar una brecha respecto al pelotón. Lampaert demostró ser un verdadero motor en este movimiento, liderando con tirones largos que contribuyeron a establecer una ventaja de hasta 16 segundos. Su determinación y esfuerzo infundieron nueva vida en la carrera, mientras atravesaban las calles de las afueras de Hamburgo.
La lucha incansable de Lampaert continuó a medida que la ventaja del trío sobre el pelotón empezó a reducirse. A pesar de la presión, el ciclista belga no se rindió y se mantuvo al frente, impulsando a su equipo y a sí mismo a medida que se acercaban al último kilómetro con cinco segundos de ventaja.
El emocionante desenlace llegó a aproximadamente 500 metros de la línea de meta, cuando Brandon McNulty del UAE Team Emirates lanzó un feroz ataque. Sin embargo, Lampaert respondió con rapidez y determinación, alcanzando y superando al corredor estadounidense. Por un momento, parecía que la victoria estaba al alcance de sus manos, pero un último arreón de Mads Pedersen del equipo Lidl-Trek cambió el rumbo de los acontecimientos.
A pesar de los esfuerzos hercúleos de Lampaert, su valiente actuación culminó con una sexta posición. Aunque la victoria se escapó por solo 75 metros, el corredor de 32 años demostró su fortaleza y su capacidad para competir al más alto nivel. Wilfried Peeters, director deportivo del Soudal Quick-Step, no pudo evitar elogiar el desempeño de Lampaert, afirmando que "Yves ha estado muy fuerte hoy y ha hecho una carrera muy buena. Ha estado cerca y, sin ese ataque del pelotón, lo habría conseguido. Pero así es el ciclismo, así que no tenemos nada que lamentar, porque hoy hemos hecho todo lo posible y hemos luchado hasta el final".