"Ganar en solitario o en un grupo reducido": El Lidl-Trek prohibió a Mads Pedersen esprintar en Dinamarca

Después de haber asegurado de manera contundente su victoria en la clasificación general de la Vuelta a Dinamarca 2025, Mads Pedersen se presentó apenas unas horas más tarde en el Criterium de Frederiksberg. Lo hizo con la motivación de ofrecer espectáculo a su público local, aunque con una consigna absolutamente innegociable marcada por su equipo, Lidl-Trek: bajo ninguna circunstancia podía esprintar.

La razón era sencilla y de peso. Con la Vuelta a España a la vuelta de la esquina, el equipo había establecido que la prioridad absoluta era evitar cualquier tipo de riesgo que pudiera comprometer su participación en la Gran Vuelta. Incluso una caída menor podía echar por tierra meses de planificación, y la prudencia se convirtió en norma obligatoria para la estrella danesa.

“El equipo me dijo que, a menos que pudiera ganar en solitario o en un grupo reducido, tenía que retirarme antes del sprint”, explicó Pedersen en declaraciones a Feltet.dk tras la carrera. “No podíamos permitirnos correr ningún riesgo de cara a la Vuelta”.

Aunque el circuito de Frederiksberg no forma parte del calendario del World Tour, sus características lo convierten en una cita peligrosa: curvas cerradas, velocidad altísima y rivales procedentes de equipos continentales muy motivados. Para un corredor que venía de una semana perfecta y se preparaba para tres de las carreras más exigentes del calendario, el riesgo era evidente.

Aun así, Pedersen no se limitó a rodar como si de un desfile se tratara. Durante los primeros 45 minutos, se le vio activo, cerrando huecos, controlando ataques y colaborando en la cabeza del pelotón. “Pasé gran parte de la primera hora cubriendo movimientos. Pero al final ya no tenía demasiado en las piernas para seguir haciéndolo”, reconoció. “La instrucción del equipo era clara: si no estaba delante en solitario o en un grupo pequeño, debía apartarme. No había otra opción”.

El trazado del criterium, un circuito técnico de 4,2 kilómetros con hasta seis curvas y la breve pero exigente subida hacia el Zoo, resultó ser más duro de lo que muchos esperaban. El viento de cara en la recta final, que además terminaba en ligera pendiente, hizo que cada vuelta se convirtiera en un esfuerzo de desgaste: “Es mucho más duro de lo que la gente piensa. El viento en la subida y en la recta de meta lo convirtieron en un reto real”, explicó el danés.

Su participación, apenas 24 horas después de haber arrasado en la Vuelta a Dinamarca con tres triunfos parciales y la victoria final en la general, fue más bien una demostración de disciplina y profesionalidad. El corredor dejó claro que atraviesa un momento de forma excepcional: “Creo que esta semana he demostrado que estoy exactamente donde necesito estar”, aseguró con confianza.

En ese contexto, la estrategia cautelosa de Lidl-Trek cobra todo el sentido. Pedersen es una pieza central en el plan del equipo para la Vuelta, con un objetivo muy claro: luchar por la clasificación por puntos. Se trata de un maillot que ya conquistó en la Vuelta de 2022 y que este mismo año volvió a lucir en el Giro de Italia, donde también sumó una victoria de etapa.

Aunque el criterium no sumó una nueva victoria a su palmarés, sí ofreció a los aficionados locales la oportunidad de ver de cerca a su ídolo antes de que se sumerja en tres intensas semanas de competición en España. “Siempre es un placer correr en Dinamarca”, dijo emocionado. “Se nota el crecimiento del ciclismo aquí. Dinamarca ya es una auténtica nación ciclista, y correr delante de este público siempre resulta especial”.

La edición de este año de la Vuelta a España tendrá además un comienzo peculiar, ya que arrancará en territorio italiano. Esa circunstancia, que podría suponer un reto logístico adicional, no parece preocupar demasiado a Pedersen. No en vano, en el Giro de Italia ya vivió una situación similar, y allí se adaptó sin problemas: ganó una etapa y defendió con éxito la maglia ciclamino hasta Roma.

En la Vuelta su misión será muy parecida: buscar victorias parciales al sprint, mantener una regularidad constante y, en última instancia, volver a vestirse con el maillot verde. Con Lidl-Trek cuidando su forma y protegiéndolo de riesgos innecesarios, las perspectivas son optimistas. “Las piernas están bien. El ritmo es el adecuado. Ahora sólo pienso en España y en luchar por el verde”, concluyó con determinación.