El TAS (Tribunal de Arbitraje Deportivo) le ha dado hoy la razón a al
UCI en el caso
Nairo Quintana, determinando que el corredor del
Arkéa Samsic tomó
Tramadol, una sustancia prohibida por el máximo organismo internacional de ciclismo, durante el pasado Tour de Francia.
La imagen del ciclista colombiano se ha visto muy dañada desde entonces, pero hay que dejar muy claro que no se dopó, como algunos "periodistas" y "aficionados" han afirmado alegremente en las últimas horas en redes sociales. El TAS deja claro que
Nairo Quintana no se ha dopado, y así lo deja bien claro en su alegato: "la prohibición de tramadol en competencias UCI es por razones médicas y no de dopaje y, por lo tanto, estaba dentro la jurisdicción de la UCI. El Panel concluyó que la decisión impugnada debía mantenerse y desestimó la apelación".
En 2017, Chris Froome dio niveles muy superiores a los pertmitidos por salbutamol en la Vuelta a España, un medicamento permitido por la UCI, pero que superando ciertos niveles, era considerado dopaje. Froome superó esos niveles, pero la UCI decidió no sancionarle. ¿Diferente vara de medir?