El drama otra vez estuvo muy cerca de un ciclista top: "El casco me salvó"

Mattias Skjelmose se vio obligado a abandonar la París-Niza la semana pasada tras sufrir una fuerte caída, chocar con un mobiliario de la carretera invisible y golpearse fuertemente la cabeza contra el suelo. El corredor del Lidl-Trek permaneció en el suelo durante varios minutos, lo que suscitó una preocupación inmediata.

Sin embargo, aunque sufrió lesiones en brazos y piernas, afortunadamente no hubo complicaciones graves, lo que le permitió reanudar los entrenamientos antes de lo que se temía en un principio: el casco le salvó.

A través de Instagram, Skjelmose compartió noticias positivas sobre su recuperación.

"Tras ser examinado de la espalda por especialistas aquí en Andorra, he recibido el visto bueno para reanudar mis entrenamientos", escribió.

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El corredor danés también destacó la importancia de las medidas de seguridad modernas en el ciclismo, reconociendo que su casco desempeñó un papel crucial a la hora de evitar una lesión más grave en la cabeza.

"Por suerte, cada vez se presta más atención a la seguridad en el ciclismo moderno, porque ese casco realmente me salvó de sufrir un traumatismo craneal grave. Me siento bendecido por no haber sufrido lesiones peores".

Una vez superado lo peor, Skjelmose se centra ahora en recuperar su mejor forma. Ha confirmado que su programa de carreras no ha cambiado y que pronto se dirigirá a un campo de entrenamiento en altitud para preparar su próximo gran objetivo.

"Ahora iré al campo de entrenamiento en altitud y continuaré con el programa Myrace como estaba previsto. Nos vemos en Itzulia País Vasco".

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