02/05/2024

Demi Vollering deja las cosas claras aplastando a la competencia en la quinta etapa de La Vuelta Femenina

Demi Vollering no ha tenido la campaña de clásicas de primavera 2024 más fructífera. Sobre todo si lo comparamos con lo que hizo el año pasado, cuando ganó la Amstel Gold Race, la Flecha Valona y la Lieja-Bastoña-Lieja. Pero en esta quinta etapa de La Vuelta Femenina ha demostrado que sigue muy activa y ha aplastado a sus rivales, colocándose con el maillot rojo al final del día.

A pesar de la llegada a la cima y del final de la etapa, ninguna corredora quiso intentar adelantarse al pelotón al principio y, por tanto, no se formó ninguna escapada. Con el pelotón aflojando, la maillot rojo Marianne Vos agradeció la relativa calma cuando se fue al suelo en una caída en el pelotón a poco más de 50 km para el final.

Lourdes Oyarbide, del Laboral Kutxa - Fundación Euskadi, también atacó a falta de unos 50 km, dando al pelotón una zanahoria colgante que perseguir. Sin embargo, una vez iniciada la primera subida categorizada del día, Oyardbide fue rápidamente barrida por el pelotón. A pesar de una serie de ataques en la subida, un pelotón ligeramente mermado se mantuvo al frente de la carrera en la cima.

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Sin embargo, casi inmediatamente en el descenso, la ex portadora del maillot rojo del Lidl-Trek, Gaia Realini, se fue al suelo, aunque rápidamente volvió a subirse a la bicicleta. A pesar de algunos ataques más en la carretera entre la penúltima subida y el final, sólo Karlijn Swinkels, portadora del maillot de la montaña, fue capaz de abrir un hueco considerable. Sin embargo, a falta de 3,2 km, también fue alcanzada.

Con el ritmo alto en cabeza, el pelotón no tardó en estallar en la subida final con una masa de corredoras, incluida la líder de la carrera, Vos, justo detrás del grupo. Poco después, Katarzyna Niewiadoma y Mavi García también se vieron en apuros, mientras Demi Vollering se colocaba en cabeza. En el último kilómetro, sólo Elisa Longo Borghini y Yara Kastelijn seguían junto a Vollering.

En lugar de lanzar un ataque brutal, el alto ritmo constante fue viendo cómo una corredora tras otra se descolgaba de la rueda trasera de Vollering y, a falta de 700 metros, Longo Borghini y Kastelijn se distanciaron con la líder del Team SD Worx - Protime avanzando en solitario. Por detrás, Kastelijn fue segunda.